Los grandes superhéroes son aquellos con los que podemos identificarnos. Invertimos nuestro tiempo y recursos para verlos alcanzar lo que creíamos imposible, pero los amamos aún más cuando muestran su lado humano, sintiendo dolor, amor y las mismas emociones que nosotros. Demostrando que, sin importar sus logros, siguen siendo de carne y hueso.
Esa es la verdadera superpotencia de Lewis Hamilton.
Considerado el mejor piloto de la Fórmula 1 de todos los tiempos, Hamilton reescribe los récords en cada carrera y posee una fortuna estimada en 450 millones de dólares. Asiste a eventos como el Met Gala con atuendos futuristas, ha tenido relaciones con estrellas de la música y modelos, y recientemente coprodujo una película taquillera con Brad Pitt.
Recientemente, Hamilton compartió en redes sociales un momento íntimo: la despedida de su fiel compañero, Roscoe.
En la publicación, Hamilton expresó el dolor de tomar la difícil decisión de despedirse de Roscoe, un bulldog de 12 años que falleció después de una batalla contra la neumonía. «Tuve que tomar la decisión más difícil de mi vida y despedirme de Roscoe. Es una de las experiencias más dolorosas y siento una profunda conexión con todos los que han pasado por la pérdida de una mascota amada. Aunque fue muy duro, tenerlo fue una de las partes más hermosas de la vida, amar tan profundamente y ser amado a cambio».
Si no has vivido esa experiencia, estas palabras podrían parecer exageradas. Pero para quienes han enfrentado el dolor de despedir a una mascota, las palabras de Hamilton resuenan profundamente. En ese momento, Hamilton demostró su humanidad, conectando con millones de personas a través de su vulnerabilidad.
Un ejemplo de la cercanía de Hamilton.

En el pasado, Hamilton ha demostrado su capacidad para conectar con la gente. En 2020, durante un verano marcado por la agitación social, Hamilton utilizó su plataforma para hablar sobre sus propias experiencias, desde el acoso que sufrió en la escuela debido al color de su piel hasta su relación con su familia.
La partida de Roscoe, quien lo acompañó en seis títulos mundiales y 84 victorias, es otro ejemplo de la humanidad de Hamilton. Roscoe, que tenía su propia cuenta de Instagram con 1.4 millones de seguidores, incluso apareció en la película «F1».
La conexión entre Hamilton y Roscoe, al igual que la de otros pilotos con sus mascotas, nos recuerda la importancia de la compañía y el amor incondicional, incluso en el mundo de la alta competición. Estos lazos nos muestran el lado más humano de nuestros héroes.