Phoenix Mercury Regresa a las Finales de la WNBA
La temporada actual marcó el inicio de una nueva etapa para las Phoenix Mercury. Sin embargo, el equipo se encuentra de nuevo en un territorio familiar: las Finales de la WNBA.
Las Mercury aseguraron su pase a su sexta final, y la primera desde 2021, el domingo por la noche. Vencieron a las Minnesota Lynx con un marcador de 86-81 en el Juego 4 de las semifinales, ganando la serie 3-1.
Al comenzar esta temporada con una plantilla casi completamente renovada y sin las dos pilares que construyeron la identidad de Phoenix durante las últimas dos décadas, surgieron dudas sobre lo que este grupo podría lograr. Kahleah Copper y Natasha Mack fueron las únicas jugadoras que regresaron de la temporada anterior. El equipo incorporó a Satou Sabally y Alyssa Thomas, pero su trío estelar (Copper, Sabally y Thomas) no estuvo completamente sano hasta el final del año. La profundidad del equipo se construyó con jugadoras desconocidas y con menos experiencia, incluyendo novatas.
Pero las Mercury abrazaron su mentalidad de «underdog» y ahora se enfrentarán al ganador entre Las Vegas Aces e Indiana Fever por el título.
Nadie esperaba nada de nosotros, excepto nosotros mismos. El orgullo y la unión de un grupo tan nuevo son impresionantes.
Nate Tibbetts, entrenador de las Mercury
Esa mentalidad se mantuvo durante la postemporada.
En la primera ronda, las Mercury se enfrentaron a las New York Liberty, campeonas defensoras, y ganaron la serie 2-1 después de perder el primer juego, pero se recuperaron con una victoria contundente de 26 puntos en la cancha de Nueva York.
Luego, el enfrentamiento de semifinales de Phoenix fue contra un equipo de Lynx hambriento, buscando redimirse de su derrota en las Finales del año anterior. Como en la Ronda 1, las Mercury perdieron el primer juego. En el Juego 2, protagonizaron una histórica remontada en la segunda mitad. El Juego 3 terminó en controversia, con Napheesa Collier de Minnesota lesionándose el tobillo izquierdo y la entrenadora Cheryl Reeve siendo expulsada y luego suspendida en los últimos segundos.
Al llegar al Juego 4, las Mercury finalmente se sintieron como las favoritas por primera vez en el año.
El entrenador Tibbetts comentó que su equipo se veía «un poco nervioso o tenso o demasiado emocionado» en el primer cuarto, donde se encontraron en un hoyo de 14 puntos. Las Mercury lograron un esfuerzo para empatar el juego al medio tiempo, pero al entrar al último cuarto, perdían por 13.
«Podríamos haber dicho, ‘Iremos al Juego 5 en Minnesota y lo resolveremos’… pero seguimos luchando», dijo Tibbetts. «Eso es lo que hacemos… simplemente seguimos jugando, y cuando haces eso, especialmente con este grupo, suceden cosas buenas.»
Con un cuarto cuarto de 31 puntos, las Mercury se convirtieron en el tercer equipo en la historia de los playoffs de la WNBA en superar un déficit de al menos 13 puntos al entrar en el período final.
Las Mercury también son el primer equipo en superar múltiples déficits de 14 puntos en una sola serie de playoffs en la historia de la WNBA, habiendo remontado desde una desventaja de 20 puntos en el Juego 2.
Thomas finalizó con 23 puntos con 11 de 18 tiros de campo y 10 asistencias, convirtiéndose en la primera jugadora en la historia de la liga con 20 puntos y 10 asistencias en múltiples victorias para cerrar una serie en una sola postemporada (Juego 3 contra Nueva York). Este también fue su doble-doble número 28 en playoffs, la mayor cantidad en la historia de la WNBA.
Sabally agregó 23 puntos, mientras que Copper y DeWanna Bonner anotaron 13 puntos cada una.
Es difícil llegar aquí. Es difícil llegar a las Finales. He estado en la liga y en todas estas apariciones en playoffs, y solo he estado en las Finales tres veces. Así de difícil es volver aquí.
DeWanna Bonner
Las Mercury no esperaban que fuera fácil. Pero dejaron claras sus metas. En su centro de entrenamiento, tenían una cuenta regresiva de cuántos días faltaban para el Juego 7 de las Finales de la WNBA. Cada día, ese número disminuía. Ahora, quedan 19 días.
«Creía en la franquicia; creía en el equipo que estaban formando», dijo Thomas. «Para mí, fue un nuevo comienzo jugar con gente que quiere lo mismo que yo y una franquicia conocida por ganar, ganar campeonatos. Ese ha sido mi objetivo: tratar de conseguir un campeonato».
La creencia siempre estuvo presente en todo el equipo. Pero las jugadoras saben que aún tienen un poco más que demostrar.
«Creo que estamos jugando al 99 por ciento», dijo Sabally. «Ganando, demostrándolo, entonces diré que estamos al 100 por ciento».
