Jackie Young demostró su valía en el segundo juego de las Finales de la WNBA, superando cualquier obstáculo para liderar a las Aces de Las Vegas a la victoria.
A pesar de un horario inusual para el partido y de no sentirse al cien por ciento en el juego anterior, Young se recuperó para ofrecer una actuación estelar.
Con una impresionante marca de 32 puntos, Young se convirtió en la primera jugadora de las Aces en alcanzar los 30 puntos en un juego de finales, contribuyendo a la victoria de su equipo sobre el Phoenix Mercury con un marcador de 91-78. Este triunfo les dio una ventaja de 2-0 en la serie.
«Jackie estaba imparable», comentó la entrenadora Becky Hammon. «Cuando logra encestar un par de tiros, es muy difícil defenderla bien. … Es una jugadora excepcional.»
Becky Hammon
La actuación de Young fue aún más destacada al anotar 21 puntos en el tercer cuarto, estableciendo un récord en las Finales de la WNBA y la mayor cantidad en un cuarto de playoffs desde 2006.
A’ja Wilson, compañera de equipo de Young, expresó su orgullo por la actuación de su compañera, resaltando la influencia de Young en el equipo. Wilson finalizó con 28 puntos y 14 rebotes.
La combinación de puntos entre Wilson y Young sumó un total de 60, convirtiéndose en la segunda mayor cantidad de puntos lograda por una pareja de jugadoras en la historia de las Finales.
Chelsea Gray también dejó su huella, convirtiéndose en la cuarta jugadora en la historia de las Finales de la WNBA en registrar múltiples juegos con 10 puntos y 10 asistencias.
«Son unas estrellas», declaró Hammon sobre Wilson, Young y Gray. «Por eso la expectativa es tan alta, por ellas tres… eso es lo que hace que este equipo sea tan difícil.»
Becky Hammon
Las Aces demostraron su dominio durante tres cuartos del juego, con un enfoque defensivo que marcó la diferencia. Después de un primer cuarto desafiante, ajustaron su defensa, limitando al Mercury y asegurando la victoria.
El entrenador del Mercury, Nate Tibbetts, reconoció la necesidad de mejorar la estrategia en los próximos juegos para contrarrestar la ofensiva de Las Vegas.
Con la serie trasladándose a Phoenix para el Juego 3, las Aces se preparan para un enfrentamiento más intenso y desafiante, conscientes de la determinación del Mercury por evitar una desventaja de 3-0.
«Ese es el objetivo: no ceder», afirmó Hammon. «No queremos tener un vestuario satisfecho porque aún no hemos llegado.»
Becky Hammon
