Nueva York – La tenista Aryna Sabalenka, tras un año lleno de desafíos y frustraciones, logró redimirse en el US Open, defendiendo su título con una victoria contundente sobre Amanda Anisimova.
Un Camino de Altibajos
La temporada de Sabalenka estuvo marcada por la decepción. Tras perder la final del Abierto de Australia y Roland Garros, la número uno del mundo llegó a Nueva York con sed de victoria. La presión era alta, pero la tenista bielorrusa estaba decidida a cambiar el rumbo.
La derrota en la final del Abierto de Australia en enero fue seguida por otra en Roland Garros, donde no pudo ocultar su frustración. Semanas después, en Wimbledon, cayó en semifinales. Estos reveses la llevaron a reflexionar y a buscar nuevas estrategias para afrontar la exigencia del circuito profesional.
En la final del US Open, Sabalenka se enfrentó a Anisimova en un partido que se extendió por 94 minutos. La tenista bielorrusa se impuso con parciales de 6-3 y 7-6 (3), demostrando su fortaleza mental y su capacidad para sobreponerse a la adversidad.
Tras asegurar el título en su tercer punto de partido, Sabalenka cayó de rodillas, visiblemente emocionada. La multitud, reunida en el Arthur Ashe Stadium, celebró su triunfo. Con esta victoria, Sabalenka se convirtió en la primera mujer en repetir como campeona del US Open desde Serena Williams.
“Esas dos finales donde perdí completamente el control de mis emociones, no quería que esto volviera a suceder”, declaró Sabalenka tras el partido.
Aryna Sabalenka
La tenista también habló sobre la importancia de mantenerse enfocada y de no rendirse ante la adversidad.
El Camino al Éxito
El camino de Sabalenka hacia la cima no fue sencillo. Aunque no fue una estrella juvenil, su dedicación y trabajo duro la llevaron a alcanzar el éxito profesional. Su perseverancia y su capacidad para superar los obstáculos la han convertido en una de las tenistas más consistentes del circuito.
Sabalenka ha demostrado una gran capacidad de adaptación, trabajando en mejorar su servicio y en controlar sus emociones en momentos críticos. La tenista ha aprendido a lidiar con la presión y a convertir las derrotas en oportunidades de aprendizaje.
El equipo de Sabalenka, liderado por su entrenador de rendimiento Jason Stacy y el ex número uno del mundo en dobles Max Mirnyi, ha jugado un papel fundamental en su desarrollo. Le recuerdan constantemente la importancia de mantenerse enfocada y de ajustar su juego durante los partidos.
En la final, Sabalenka demostró su capacidad para mantener la calma incluso en momentos de tensión. A pesar de cometer errores, logró recuperarse y asegurar la victoria en el tiebreak.
Tras el partido, Sabalenka agradeció a su equipo y expresó su alegría por el triunfo. Su victoria en el US Open representa la culminación de un año de esfuerzo y perseverancia, y demuestra que, a pesar de las dificultades, es posible alcanzar el éxito.
