Trump Busca Nombrar Estadio de los Commanders en su Honor
Fuentes cercanas a la situación revelan que el expresidente Donald Trump ha expresado su deseo de que el nuevo estadio de los Washington Commanders, con un costo de 3.7 mil millones de dólares, lleve su nombre. Se han establecido comunicaciones a través de canales no oficiales con miembros del grupo propietario de los Commanders, liderado por Josh Harris, para manifestar esta solicitud.
El nuevo estadio se construirá en el sitio del antiguo Estadio RFK, que fue la casa del equipo entre 1961 y 1996. Se espera que Trump asista al partido en casa de los Commanders contra los Detroit Lions como invitado de Harris, y participará en actividades de medio tiempo en honor a los militares.
«Sería un nombre hermoso, ya que fue el presidente Trump quien hizo posible la reconstrucción del nuevo estadio.»
Declaraciones de Karoline Leavitt
Aunque los Commanders poseen los derechos de nombre del nuevo estadio, la decisión de conmemorar a una persona en el nombre del estadio es separada. Esta decisión involucraría al Consejo del Distrito de Columbia, que arrendará el estadio a los Commanders, y al Servicio de Parques Nacionales, que administra los terrenos federales del antiguo Estadio RFK.
En abril, el comisionado de la NFL, Roger Goodell, junto con la alcaldesa de D.C., Muriel Bowser, y Harris, anunciaron la construcción del nuevo estadio de los Commanders en Washington. En julio, Trump amenazó con bloquear la construcción si Harris no restauraba el antiguo nombre del equipo, los Redskins, que es considerado ofensivo por algunos grupos nativos americanos.
El 17 de septiembre, el Consejo de D.C. aprobó el Proyecto del Estadio RFK. Los Commanders invertirán 2.7 mil millones de dólares para construir el estadio de 65,000 asientos, ubicado en un terreno de 174 acres a 2 millas del Capitolio de los Estados Unidos. El distrito aportará 1 mil millones de dólares y arrendará el estadio al equipo. El proyecto incluirá desarrollos de vivienda, un complejo deportivo y tiendas minoristas, siendo el proyecto de desarrollo económico más grande en la historia de D.C.
Los Commanders actualmente juegan en el Northwest Stadium en Landover, Maryland, a 9 millas del sitio de RFK. El sitio del Estadio RFK tiene un gran valor sentimental para los fanáticos de Washington y los miembros de la actual propiedad de los Commanders.
Una fuente con conocimiento del acuerdo del estadio indicó que Trump tiene «mucha influencia» para lograr que el estadio lleve su nombre, independientemente de la entidad gubernamental que tome la decisión final. La fuente agregó que Trump tiene diversas estrategias para asegurar que se cumpla su deseo.
Según fuentes, Trump no busca comprar el nombre ni que un patrocinador corporativo lo haga por él. Desea que el estadio de los Commanders se llame en su honor, como un reconocimiento a su trabajo para aprobar el proyecto.





