Los Ravens de Baltimore: Un Inicio Inesperado y Preocupante
Los Baltimore Ravens se encuentran en una situación inusual y preocupante. Tras la derrota ante los Chiefs por 37-20, el equipo inicia la temporada 2025 con un récord de 1-3, algo que no sucedía desde 2015. Esta es solo la cuarta vez en la era de Lamar Jackson que los Ravens registran un 1-3 en cualquier lapso de cuatro partidos con su estrella en el campo. Además, han permitido 133 puntos en los primeros cuatro juegos, la mayor cantidad en un período similar durante los 18 años de John Harbaugh como entrenador.
A pesar de las derrotas ante equipos fuertes como Bills, Lions y Chiefs, el rendimiento de los Ravens es inferior a las expectativas. El equipo lamenta haber perdido un juego ganable contra Buffalo, donde un pase de los Bills rebotó a favor de Keon Coleman. Aunque el equipo ha anotado 131 puntos, la situación real es peor de lo que indican los números.
La falta de control del balón, con tres fumbles de Derrick Henry en cuatro juegos, y la incapacidad para detener a los Bills y Lions en momentos clave, han sido problemas significativos. En el partido contra los Chiefs, los Ravens se vieron superados, y el marcador final no refleja completamente el dominio del rival.
Lamar Jackson también se vio afectado por una lesión en el tendón de la corva, y no fue el único jugador de Baltimore ausente. Las lesiones son un factor clave en el desempeño actual del equipo, algo que lograron evitar en 2024, pero que ahora les está pasando factura.
Análisis de las Lesiones y su Impacto
Las lesiones han afectado la defensa de los Ravens de manera significativa. En 2024, los Ravens fueron el equipo más saludable de la liga, según el índice de juegos ajustados perdidos. Sin embargo, esta temporada, las lesiones han sido un problema recurrente.
En el partido contra los Chiefs, los Ravens tuvieron seis titulares lesionados en defensa. Jugadores clave como Kyle Van Noy, Nnamdi Madubuike, Travis Jones, Roquan Smith, Marlon Humphrey y Nate Wiggins se perdieron el partido por lesión. Esto obligó a dar minutos a jugadores menos experimentados, lo que afectó el rendimiento defensivo.

La imagen muestra a Patrick Mahomes conectando con Tyquan Thornton para un touchdown, extendiendo la ventaja de los Chiefs sobre los Ravens.
La falta de jugadores clave en defensa ha afectado el rendimiento del equipo. Los novatos han tenido que asumir roles importantes antes de tiempo, lo que ha generado problemas contra el juego terrestre y aéreo.
El contrato de Lamar Jackson y las extensiones de contrato a otros jugadores clave han impactado la estructura del equipo. La profundidad del roster se ha visto comprometida, lo que hace que las lesiones sean aún más perjudiciales.
La defensa de los Ravens se encuentra en una situación difícil, lo que se refleja en su desempeño general y en las estadísticas de EPA y QBR.
La falta de efectividad en la presión al mariscal de campo y los problemas de comunicación en el campo han contribuido a los problemas defensivos.
Inconsistencia en la Ofensiva
A pesar del mal récord, la ofensiva de los Ravens ha tenido un inicio explosivo, con buenos resultados en cuanto a puntos anotados. Sin embargo, la producción ofensiva se vio afectada por la lesión de Jackson en el partido contra los Chiefs.
El juego terrestre, que fue una fortaleza en 2024, ha mostrado inconsistencias. Aunque el equipo lidera la liga en yardas por acarreo, el rendimiento en cuanto a la tasa de éxito ha disminuido. La dependencia de jugadas explosivas y la falta de consistencia en las carreras han afectado el ritmo ofensivo.
La distancia promedio para el tercer down ha aumentado, lo que dificulta la ofensiva. Los sacks y las pérdidas de balón han interrumpido el progreso ofensivo.

La imagen muestra a Justice Hill anotando un touchdown tras un pase de Lamar Jackson.
Jackson ha sufrido un aumento en la cantidad de sacks, lo que ha afectado negativamente el rendimiento ofensivo. La falta de protección de la línea ofensiva y la dificultad para leer las defensas rivales han contribuido a este problema.
La falta de Stanley y Ricard también ha afectado a la ofensiva. La combinación de jugadas explosivas y la dificultad para mantener el balón en movimiento ha afectado el ritmo del equipo.
La falta de efectividad en la zona roja ha sido otro problema para los Ravens, quienes no han podido convertir sus posesiones en touchdowns.
La ofensiva de los Ravens es inconsistente, con demasiadas jugadas negativas y dificultades en situaciones de tercer down.
¿Pueden Solucionarse los Problemas?
Sí, es posible. El calendario más favorable que se avecina podría ayudar. Además, la recuperación de jugadores clave podría mejorar el rendimiento del equipo. Sin embargo, no hay garantías de que los jugadores actuales se mantengan saludables.