En un ambiente marcado por la tensión, el receptor abierto de los New York Giants, Malik Nabers, y el entrenador Brian Daboll protagonizaron un intercambio acalorado durante el partido contra los Washington Commanders, un encuentro que finalizó con una derrota de 21-6.
Ambos, Nabers y Daboll, atribuyeron la situación a la intensidad inherente a la competencia, aunque Nabers admitió que sentía que la energía del equipo no era la adecuada.
Este incidente, capturado por las cámaras, llevó a una conversación entre jugador y entrenador. Nabers, consciente de la atención mediática que genera, reconoció la necesidad de ser más cauteloso en su comportamiento.
La actuación del equipo en el campo, con solo 231 yardas totales y sin touchdowns, reflejó las dificultades ofensivas que ya se habían visto la temporada pasada.
A pesar de recibir 12 pases, de los cuales solo completó cinco para 71 yardas, Nabers aclaró que su frustración no se debía a la falta de balones, sino a su desempeño general y al intento de motivar al equipo.
Tengo una cara de «b—-» natural. Es simplemente lo que es. Esa es mi cara. No sé. Cuando todos ustedes me hablan, me veo igual todo el tiempo. Es como soy. Supongo que tengo que sonreír más.
Malik Nabers
El análisis del partido no fue agradable para Nabers, quien se sintió decepcionado al revisar la cinta del juego.
En cuanto a su salud, Nabers participó de forma limitada en el entrenamiento del miércoles debido a una lesión en la espalda, aunque tanto él como Daboll creen que estará disponible para el próximo encuentro contra los Dallas Cowboys.
El desafío para los Giants no solo será vencer a los Cowboys, sino también romper la racha de derrotas que arrastran contra ellos, incluyendo las dos de la temporada pasada.
Nabers, al ser cuestionado sobre la frustración que genera esta situación, optó por finalizar la conferencia de prensa.