
El nacimiento de su hijo Becks ha sido el catalizador para que Bubba Wallace encuentre alegría en la vida y en las carreras.
Bubba Wallace, el piloto de NASCAR, ha experimentado una transformación notable, encontrando una nueva perspectiva gracias a la paternidad. Antes conocido por su frustración y dificultad para manejar los malos resultados, ahora muestra una actitud más positiva y comprometida, según fuentes cercanas al piloto.
La llegada de su hijo Becks en septiembre de 2024 marcó un punto de inflexión. Wallace ha aprendido a disfrutar de la paternidad y a dejar que los problemas de la pista no afecten su vida personal. Sus allegados han notado un cambio significativo en su estado de ánimo, con una mayor capacidad para manejar la presión y mantener una actitud optimista.
Ahora vuelvo al autobús y Amanda está más molesta que yo. Es difícil navegar eso porque a lo largo de los años ella ha sabido que esto es lo que tenemos y tengo que hacer que esto funcione… Ahora vuelvo, como después de Kansas, y estaba bien, y ella está fuera de sí. Es un poco divertido.
Bubba Wallace
Este cambio se hizo evidente tras la carrera en Kansas Speedway, donde Wallace lideraba en la última vuelta antes de ser empujado contra la valla por su compañero de equipo Denny Hamlin. A pesar de la decepción, Wallace manejó la situación con profesionalismo, mientras que su esposa Amanda reaccionó con la misma frustración que él solía sentir.
La transformación de Wallace no solo se refleja en su vida personal, sino también en su desempeño en la pista. Ha logrado una mayor consistencia y ha aprendido a manejar la presión, lo que le permite competir con mayor eficacia. Su spotter y amigo de toda la vida, Freddie Kraft, ha notado cómo las «altas son aún más altas y las bajas nunca son tan bajas como antes».

Actualmente, Wallace se encuentra en camino de tener su mejor temporada en la Cup Series, ocupando el décimo lugar en la clasificación y habiendo logrado una victoria en Indianápolis. Su madurez y mentalidad han impresionado a su equipo y a su compañero Denny Hamlin, quien destaca su liderazgo y el rendimiento del equipo 23.
Wallace ha aprendido a mantener la perspectiva y a no dejar que los problemas de la pista afecten su vida personal, lo que le permite disfrutar más de su tiempo en el circuito. Esta nueva actitud, junto con el apoyo de su equipo y el nacimiento de su hijo, ha transformado su enfoque de las carreras y de la vida.