Verlander Celebra su Primera Victoria con los Gigantes en un Duelo Épico
En un encuentro lleno de emociones, Justin Verlander finalmente saboreó la victoria como miembro de los Gigantes de San Francisco. El experimentado lanzador, de 41 años, brilló en el montículo y guio a su equipo a un triunfo contundente sobre los Bravos de Atlanta, asegurando la serie en el Truist Park.
Verlander, tras un inicio de temporada complicado, lanzó cinco sólidas entradas sin permitir carreras. Aunque concedió cinco bases por bolas y necesitó 98 lanzamientos, el derecho limitó a los Bravos a solo un imparable, demostrando la tenacidad que lo caracteriza.
Este triunfo no solo representa la primera victoria de Verlander en la temporada, sino también su primera desde el 28 de septiembre de 2024, cuando aún jugaba para los Astros.
Ha sido un trecho difícil física y mentalmente. Pero este triunfo se siente especial. Finalmente pude aportar al equipo y eso es lo más importante.
Justin Verlander
Tras el juego, sus compañeros celebraron con él, obsequiándole una botella de vino como muestra de reconocimiento. El mánager Bob Melvin elogió su desempeño: «Lanzó 40 pitcheos en el primer inning, pero se mantuvo firme en condiciones difíciles. Nuestro bullpen estaba agotado y él sabía que necesitábamos ese esfuerzo. Fue una muestra de carácter».
La ofensiva de los Gigantes también tuvo una destacada actuación, liderada por Rafael Devers. El dominicano conectó dos cuadrangulares, incluyendo uno de tres carreras en la sexta entrada. Devers finalizó el encuentro con una marca de 5-3, con cuatro carreras impulsadas, sumando cinco remolcadas en la serie y registrando su 20º juego de múltiples jonrones en Grandes Ligas.
Uno de sus jonrones llegó tras un slider de Spencer Strider que estaba a muy baja altura, convirtiéndose en el segundo pitcheo más bajo que termina en jonrón esta temporada.
Con esta victoria, los Gigantes no solo aseguraron la serie ante Atlanta, sino que también extendieron a 17 las entradas consecutivas sin permitir carreras entre el segundo juego y parte del tercero, hasta que los Bravos reaccionaron en la séptima entrada del duelo final. Durante ese lapso, San Francisco anotó 20 carreras, marcando un claro dominio tanto desde el montículo como con el bate.