Filadelfia fue testigo de un emocionante triunfo de los Phillies, quienes se impusieron a los Red Sox con un marcador de 3-2 en un juego que se definió en la décima entrada.
El corredor automático Brandon Marsh anotó la carrera de la victoria gracias a una interferencia del receptor, con las bases llenas, sellando así el triunfo para los Phillies.
En la parte baja de la décima entrada, Edmundo Sosa realizó un swing de control que resultó en un contacto con el guante del receptor Carlos Narváez. Tras una revisión, se determinó la interferencia, permitiendo a Marsh anotar la carrera decisiva.
Esta victoria por interferencia del receptor es un evento poco común en la historia de la MLB.
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El lanzador abridor de los Phillies, Zack Wheeler, tuvo una destacada actuación, lanzando seis entradas y permitiendo dos carreras limpias con siete hits y diez ponches. Los relevistas Tanner Banks, Orion Kerkering, Matt Strahm y Max Lazar, quien obtuvo su primera victoria en las Grandes Ligas, mantuvieron a raya a los Red Sox.
Los Phillies anotaron dos carreras en la cuarta entrada, gracias a un doble de Bryce Harper, un sencillo de Nick Castellanos y un sencillo de J.T. Realmuto.
Jarren Duran conectó un jonrón para Boston al inicio del juego, y Trevor Story empató el marcador en la sexta entrada con un sencillo impulsador.
Walker Buehler, el abridor de Boston, lanzó siete entradas, permitiendo seis hits y dos carreras, una de ellas limpia.
