Keegan Bradley, tras asumir el cargo de capitán de la Ryder Cup, enfrentó una dura realidad. En sus primeras declaraciones públicas después del evento en Bethpage Black, Bradley compartió sus sentimientos sobre la derrota.
Ganas, y es gloria para toda la vida. Pierdes, y es ‘tendré que vivir con esto por el resto de mi vida’. No hay parte de mí que crea que alguna vez superaré esto.
Keegan Bradley
Bradley, quien ya había participado en dos ediciones de la Ryder Cup como jugador, lideró al equipo estadounidense en su intento por vencer a Europa en Nueva York. A pesar de ser favoritos en casa, los estadounidenses se encontraron en una situación desfavorable desde el inicio, con una brecha de 11½-4½ puntos antes de la jornada final.
El capitán admitió que la experiencia fue emocional y triste.

La derrota caló hondo en Bradley, quien reconoció la dificultad de aceptar el resultado.
Este evento ha sido tan brutal para mí. Es algo tan extraño amar algo tanto que no te da nada.
Keegan Bradley
Aunque Estados Unidos logró sumar 8½ puntos en los 12 partidos individuales del domingo, el resultado final no fue suficiente para cambiar el curso del torneo.
Bradley ha asumido parte de la responsabilidad por algunos errores, incluyendo la configuración del campo que, combinada con la lluvia, facilitó el juego en un campo conocido por su dificultad. Otros han señalado las parejas y la decisión de no incluirse a sí mismo en el equipo.
El capitán describió el período posterior a la Ryder Cup como uno de los momentos más difíciles de su vida.
Bradley, a sus 39 años, se ha planteado la posibilidad de volver a jugar en la Ryder Cup, aunque reconoce que no es seguro que tenga la oportunidad. A pesar de esto, Bradley ha logrado mantener un alto rendimiento en el PGA Tour, incluso después de ser nombrado capitán, logrando victorias importantes.
Aunque tuvo momentos en los que deseó ser el primer capitán jugador desde Arnold Palmer en 1963, Bradley afirma que tomó la decisión correcta.
Bradley reflexionó sobre la experiencia de ser capitán, destacando el apoyo recibido por los aficionados estadounidenses.
A pesar de la derrota, Bradley valora la experiencia única que vivió como capitán de la Ryder Cup, combinando esta función con su desempeño en el PGA Tour.

