Tras la humillante derrota 4-1 ante Argentina en la clasificación para el Mundial, la selección de Brasil busca un cambio de rumbo. Dorival Júnior, quien no logró dar la talla, deja su puesto tras un partido donde Brasil fue superado de principio a fin.
Con urgencia, Brasil se enfocó en concretar el fichaje de Carlo Ancelotti. El anuncio oficial llegó, marcando el inicio de una nueva era para la «Canarinha».
Esta decisión ha generado controversia. Para algunos, es un desafío a la tradición de tener un entrenador brasileño al frente del equipo más laureado en la historia de los mundiales.
Sin embargo, los jugadores, acostumbrados a trabajar con entrenadores de diversas nacionalidades, parecen no preocuparse. Estrellas como Vinícius Júnior, quien tiene una estrecha relación con Ancelotti, están entusiasmados con la idea de seguir bajo su dirección.
Además, se especula con el posible regreso de Casemiro, quien fue clave para Ancelotti en el Real Madrid, y podría ser la solución para reforzar el centro del campo, un área problemática en la actual clasificación.
Se ha informado que Ancelotti ya ha contactado a Casemiro y Neymar.
Será interesante ver cómo Ancelotti maneja a Neymar, el máximo goleador histórico de Brasil. El regreso de Neymar, quien se espera que esté disponible en junio, será crucial para los próximos partidos.
El éxito de Ancelotti con jugadores brasileños fue un factor clave para la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF). El presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues, ve en Ancelotti al entrenador ideal.
Rodrigues destaca la experiencia de Ancelotti como jugador y entrenador, incluyendo su participación en el Mundial de 1994 como asistente de Arrigo Sacchi. Su capacidad de adaptación y sus títulos en las principales ligas europeas también son relevantes.
Brasil no ha ganado un Mundial desde 2002, y Ancelotti es visto como el hombre para superar esta barrera.

Traer a Carlo Ancelotti para dirigir a Brasil es más que una jugada estratégica. Es una declaración al mundo de que estamos decididos a recuperar nuestra posición en lo más alto del podio.
Ednaldo Rodrigues
El primer desafío de Ancelotti será inmediato. Brasil debe convocar a su equipo esta semana para los próximos partidos de clasificación contra Ecuador y Paraguay. Ancelotti asumirá formalmente el cargo el 26 de mayo y tendrá poco tiempo para preparar los partidos del 5 y 10 de junio.
Ancelotti cuenta con dos grandes ventajas. La primera es la expansión del Mundial. Brasil, actualmente cuarto en la tabla de Sudamérica, tiene una buena posición para clasificar, a pesar de los partidos difíciles que se avecinan.

La otra ventaja es que la situación actual difícilmente podría empeorar. La actuación contra Argentina fue tan mala que no se puede repetir.
Ancelotti buscará ocultar los defectos y acentuar las fortalezas del equipo, con su experiencia y liderazgo.
La llegada de entrenadores extranjeros no es algo nuevo en el fútbol brasileño. En el pasado, técnicos de Uruguay y Hungría influyeron en el desarrollo del fútbol brasileño.
Ancelotti ha sido influenciado por jugadores brasileños y también ha sido una influencia en el fútbol brasileño.
Ancelotti fue el principal referente para Tite, el entrenador que llevó a Brasil a los últimos dos Mundiales, donde fueron eliminados en cuartos de final.
Si Ancelotti logra llevar a Brasil a las semifinales y conseguir el sexto título, podría convertirse en el mejor entrenador de la historia del fútbol.