Indianapolis – Bubba Wallace celebró una histórica victoria en la Brickyard 400, marcando un hito en su carrera y en la historia del automovilismo. Tras bajarse del auto número 23, Wallace, con los puños en alto, compartió la alegría con su familia, saboreando cada instante de este triunfo trascendental.
Wallace, de 31 años, superó diversos desafíos durante la carrera, incluyendo una interrupción por lluvia de 18 minutos, dos emocionantes prórrogas, la preocupación por la gasolina y la intensa competencia del campeón defensor, Kyle Larson. Esta victoria lo convierte en el primer piloto afroamericano en ganar una carrera importante en el óvalo de 2.5 millas del Indianapolis Motor Speedway.
Esta victoria es realmente especial. Al salir de la curva 4, sabía que lo lograría, a menos que nos quedáramos sin gasolina. Me sorprendió no estar llorando como un bebé.
Bubba Wallace
Este es el tercer triunfo de Wallace en la Copa NASCAR, y el primero en uno de los cuatro eventos más prestigiosos de la serie, junto con la Daytona 500, la Coca-Cola 600 y la Southern 500. Además, rompió una racha de 100 carreras sin victorias que se remontaba a 2022 en Kansas, asegurando un lugar en los playoffs. Su otra victoria fue en Talladega en 2021.
La diferencia final fue de 0.222 segundos, pero la tensión fue palpable.

Larson redujo una desventaja de 5.057 segundos a aproximadamente tres segundos a falta de seis vueltas, cuando la bandera amarilla apareció debido a la lluvia. Los coches se detuvieron en el carril de boxes con cuatro vueltas restantes, lo que obligó a Wallace a replantear su estrategia de reinicio.
Wallace se mantuvo concentrado y logró superar a Larson en la segunda curva durante el primer reinicio. Un accidente detrás de él provocó una segunda prórroga, lo que obligó a su equipo a calcular si tenían suficiente combustible para terminar la carrera o si necesitaba ceder el liderato y repostar.
Para Wallace, no había otra opción.
Lo primero que pensé fue, ‘Aquí vamos de nuevo’. Pero luego dije, ‘Quiero ganar esto directamente. Quiero volver a correr’. Y aquí estamos.
Bubba Wallace
Wallace volvió a superar a Larson en el reinicio y se alejó, impidiendo que Larson se convirtiera en el cuarto ganador consecutivo de la carrera.
La victoria también alivió la frustración que Wallace sintió el sábado, cuando pasó la mayor parte de la sesión de clasificación en la pole provisional, solo para ver a Chase Briscoe reclamar el primer puesto de salida en una de las últimas vueltas de la sesión.
El triunfo añadió un impulso extra al equipo 23XI Racing, copropiedad del miembro del Salón de la Fama del baloncesto Michael Jordan y del ganador de la carrera de la semana pasada, Denny Hamlin, mientras continúan su batalla legal con la NASCAR por su estatus de propietario.
La victoria de Wallace en la Brickyard 400 es un momento memorable en su carrera, y un testimonio de su perseverancia y habilidad en la pista.