Dustin Poirier Cierra su Carrera en la UFC con una Batalla Épica
En una noche llena de emociones en la King Smoothie Arena, Dustin Poirier se despidió del octágono en su última pelea de una exitosa carrera en la UFC. Aunque no logró la victoria, el combate contra Max Holloway fue un digno cierre para un luchador que ha dejado una huella imborrable en el deporte.
La pelea, que definía el título BMF, fue una montaña rusa de emociones, con ambos luchadores mostrando lo mejor de su arsenal. Holloway se llevó la victoria por decisión unánime de los jueces, con tarjetas de 49-46, 49-46 y 48-47.
Es abrumador, honestamente. Me siento apreciado. Siento que me ven. Nunca salí de la lucha y la miré de esta manera. Nunca pude mirarlo en tercera persona. Esta semana ha sido increíble. Me siento amado por los fanáticos, Louisiana y la empresa. Soy un niño viviendo el sueño aquí, hombre, lanzando golpes.
Dustin Poirier
Tras la victoria, Holloway expresó su respeto por Poirier y mencionó brevemente a Ilia Topuria, campeón de las 155 libras, antes de ceder el protagonismo a Poirier.
Poirier, con 36 años, se retira empatado en el quinto lugar de la historia de la UFC en cuanto a victorias, con un total de 22. Además, está en el cuarto puesto en cuanto a nocauts, con 11.
El legado de Poirier incluye tres oportunidades por el título indiscutido en 2019, 2021 y 2024, aunque no logró coronarse en ninguna de ellas, enfrentándose a Khabib Nurmagomedov, Charles Oliveira e Islam Makhachev. Sin embargo, en 2019, conquistó el título interino de peso ligero al derrotar a Holloway por decisión unánime en una pelea que ya es considerada un clásico.
El combate del sábado, la trilogía contra Holloway, ofreció todo lo que los fanáticos esperaban de una pelea de Poirier. Holloway lo derribó con un derechazo en los primeros minutos, pero Poirier se recuperó. En el segundo asalto, Holloway volvió a derribarlo, pero Poirier respondió, derribando a Holloway y buscando una guillotina.
Poirier entró al octágono acompañado del rapero de Nueva Orleans Lil Wayne, en un emotivo gesto, ya que Poirier había usado la canción «A Milli» de Lil Wayne en su debut en la UFC en 2011. La UFC reorganizó su calendario para que la última pelea de Poirier fuera en su estado natal.
Según las estadísticas de la UFC, Holloway conectó 186 golpes totales contra 114 de Poirier. Poirier cortó a Holloway debajo del ojo izquierdo en el cuarto asalto, pero el volumen de golpes de Holloway comenzó a afectar a Poirier. Sus movimientos se volvieron un poco lentos al final, aunque tuvo la energía suficiente para aceptar la invitación de Holloway de pararse en el centro del octágono y pelear hasta el final.
Esta victoria es un gran logro para Holloway, quien venía de la primera derrota por nocaut de su carrera ante Topuria en su pelea por el título de las 145 libras en octubre pasado.