La futbolista Jess Carter expresó su alivio al ver que Lauren James no fue la única jugadora de Inglaterra en fallar un penalti durante la tanda de penales contra Suecia en el torneo europeo, asegurando el pase de Inglaterra a la final.
Carter, quien fue víctima de abuso racista en línea durante el campeonato, temía que James sufriera un acoso «astronómico» en redes sociales si hubiera sido la única en fallar.
En el encuentro, Beth Mead, Alex Greenwood y Grace Clinton, también fallaron sus penales, pero las Lionesses lograron avanzar y posteriormente ganar el torneo ante España en otra tanda de penales.
Es horrible decirlo, pero es casi como un suspiro de alivio cuando otras jugadoras que no eran negras fallaron un penalti, porque el racismo que habría venido con LJ [Lauren James] siendo la única que falló habría sido astronómico.
Jess Carter
Carter, en declaraciones, explicó que el impacto psicológico del abuso la hizo sentir «asustada» cuando la entrenadora Sarina Wiegman le comunicó que sería titular en la final.
«Esa es la primera vez que he tenido miedo; demasiado miedo para jugar», dijo.
La jugadora añadió que el abuso la hizo sentir «pequeña» y dudar de todo lo que hacía, afectando su confianza en el campo y entristeciendo a su familia.
El director ejecutivo de la Asociación de Fútbol, Mark Bullingham, declaró durante el torneo que el organismo había remitido el «abominable» abuso a la policía del Reino Unido.
