Preocupación por la salud mental de Marshawn Kneeland antes de su trágico fallecimiento
La policía de la Universidad de Western Michigan fue llamada en dos ocasiones para realizar controles de bienestar a Marshawn Kneeland, incluyendo una solicitud de los entrenadores preocupados por la posesión de un arma de fuego. Kneeland, quien jugaba como defensive end para los Dallas Cowboys, falleció el 6 de noviembre a los 24 años, aparentemente por una herida de bala autoinfligida en Frisco, Texas.
Documentos revelan que existían preocupaciones sobre su salud mental desde 2020. Un incidente en junio de 2023, diez meses antes de ser seleccionado por los Dallas Cowboys en la segunda ronda del draft de la NFL, involucró al entrenador de Western Michigan, Lance Taylor, y al entonces coordinador defensivo, Lou Esposito. Estos llamaron a la policía por la preocupación de que Kneeland se había separado recientemente de su novia y querían asegurarse de que estaba mentalmente apto para poseer un arma.
Después de hablar con Kneeland, entregó voluntariamente el arma a la policía para su custodia hasta ser autorizado por un consejero.
Informe policial
Doce días después, Kneeland recuperó su arma tras obtener una carta de un trabajador social del Centro de Salud Sindecuse de Western Michigan, que indicaba que Kneeland no representaba una amenaza para sí mismo ni para otros. Ni Taylor ni Esposito respondieron a las solicitudes de comentarios.
En otro incidente en septiembre de 2020, un amigo de Kneeland llamó al 911 expresando preocupación por su bienestar. La policía encontró a Kneeland cerca de las vías del tren en Kalamazoo. Kneeland declaró que esperaba que un tren lo atropellara para acabar con su vida. El informe indica que no quería buscar ayuda médica, pero los agentes del alguacil del condado de Kent lo enviaron al Hospital Borgess.
Un portavoz de los Cowboys no respondió a preguntas sobre si el equipo estaba al tanto de los incidentes previos de Kneeland. Su prima, Nicole Kneeland-Woods, declaró que no tenía conocimiento de estos hechos. La familia de Kneeland realizó un servicio conmemorativo privado el jueves en Wyoming, Michigan. La policía de Texas encontró el cuerpo de Kneeland la mañana del 6 de noviembre después de que evadiera a los oficiales durante una persecución vehicular.
Según un informe del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Kneeland conducía a alta velocidad, a veces superando las 145 millas por hora, y realizando cambios de carril peligrosos. Los oficiales recibieron información de que Kneeland había expresado «ideaciones suicidas».







