El entrenador de los Miami Dolphins, Mike McDaniel, expresó que no está preocupado por su puesto, a pesar de la reciente derrota 31-6 ante los Cleveland Browns, que dejó a su equipo con un récord de 1-6.
McDaniel, visiblemente decepcionado, enfatizó que centrarse en la seguridad de su trabajo sería perjudicial para la organización. Afirmó que su prioridad es cumplir con sus responsabilidades y darlo todo por los Dolphins. Además, considera que pensar en su futuro personal sería un desaire para los jugadores, entrenadores y la organización.
La forma en que veo este trabajo es que encuentro muy ofensivo para todas las partes involucradas si estoy pensando en tener el trabajo; necesito estar haciendo mi trabajo.
Mike McDaniel
El entrenador reconoció que la frustración de los jugadores se hizo evidente durante el partido contra los Browns, lo que contribuyó a la derrota. Los Dolphins cometieron 11 penalizaciones por 103 yardas, cifras récord desde que McDaniel fue contratado en 2022. También sufrieron cuatro pérdidas de balón, incluyendo tres intercepciones del quarterback Tua Tagovailoa y un fumble del retornador Dee Eskridge.
McDaniel indicó que evaluarán todos los aspectos del juego y que podrían realizar cambios en el personal para el próximo partido de la Semana 8 contra Atlanta. El entrenador dejó entrever que algunos jugadores podrían ser reemplazados si no mejoran su rendimiento.

McDaniel mencionó que, aunque hubo «múltiples factores» en las tres intercepciones de Tagovailoa, dos de ellas fueron «extremadamente evitables». Aunque no sugirió un cambio de quarterback, Tagovailoa fue reemplazado en el último cuarto por el novato Quinn Ewers.
El entrenador añadió que el equipo considerará cambiar su estilo de juego si es necesario, y que «todo está sobre la mesa».
Tagovailoa finalizó el encuentro con 12 de 23 pases completados, 100 yardas y tres intercepciones, lo que resultó en su peor índice de pasador de su carrera, con 24.1.
El quarterback reconoció que su desempeño no ha sido el esperado y que debe mejorar su juego. Tagovailoa, quien firmó una extensión de contrato por cuatro años y 212.1 millones de dólares la temporada pasada, admitió que no está satisfecho con su rendimiento actual.
El apoyador Bradley Chubb declaró que el vestuario de Miami permanece unido y que aún es posible cambiar el rumbo de la temporada.