El Desafío de Steve Ballmer: Triunfo o Fracaso con los Clippers
En 2014, Steve Ballmer, tras adquirir los LA Clippers por una cifra récord de $2 mil millones, prometió audacia y optimismo. Once años después, el sueño de un campeonato, e incluso una aparición en las Finales de la NBA, no se ha materializado. La adquisición de Kawhi Leonard en 2019, la apuesta más ambiciosa de Ballmer, ha generado más controversias que éxitos en la cancha.
Desde la llegada de Leonard, los Clippers han enfrentado un escrutinio sin precedentes por parte de la liga y otros equipos. Han lidiado con demandas por violaciones de las reglas, multas y múltiples investigaciones de la NBA, incluyendo acusaciones de manipulación del tope salarial. La sombra de una investigación sobre un acuerdo de patrocinio de $28 millones para Leonard, en el cual Ballmer invirtió en una empresa ahora en bancarrota, planea sobre el equipo.
Los Clippers, buscando reforzar su plantilla, han sumado veteranos como Chris Paul, Bradley Beal, James Harden, John Collins y Brook Lopez. Sin embargo, el foco sigue siendo Leonard, quien recibirá $50 millones en la próxima temporada y es elegible para una extensión el próximo verano.
Ejecutivos de equipos rivales coinciden en que la inversión inicial en Leonard fue una decisión inteligente en su momento, pero ahora la consideran un «desastre». La organización, desesperada por una estrella y relevancia, cedió a las demandas de Leonard y su entorno, lo que llevó a una cultura interna de temor y secreto, y una serie de batallas legales y acusaciones de mala conducta.

Desde 2019, los Clippers han enfrentado dos demandas civiles separadas que involucran a Leonard. Han sido multados al menos dos veces por la NBA por violaciones relacionadas con Leonard. También ha habido al menos tres investigaciones de la NBA sobre los Clippers que involucran a Leonard.
La Llegada de Leonard: Un Trato Arriesgado
El 5 de julio de 2019, los ejecutivos de los Clippers vivieron momentos de alta tensión. Después de días de negociaciones, temían que Leonard, la estrella que esperaban transformar su franquicia, los rechazara en el último momento para unirse a los Lakers. Para asegurar su fichaje, los Clippers acordaron adquirir a Paul George de Oklahoma City, a cambio de una considerable cantidad de selecciones de primera ronda y jugadores.
Leonard y su equipo, liderados por su tío Dennis Robertson, establecieron una serie de exigencias, incluyendo una participación en la propiedad del equipo, acceso a un avión privado y dinero garantizado de patrocinios. Estas solicitudes, fuera de los límites del acuerdo de negociación colectiva de la liga, fueron en parte aceptadas por los Clippers, quienes también accedieron a que Leonard viviera inicialmente en San Diego y a que se le permitiera saltarse compromisos con los medios y eventos comunitarios.
La estrategia de silencio público, liderada por Robertson, se convirtió en una política clave para proteger la imagen de Leonard. Los Clippers, ansiosos por demostrar que eran una organización amigable para las estrellas, aceptaron estas condiciones, incluso despidiendo a un comentarista por comentarios negativos sobre Leonard.
La llegada de Leonard generó júbilo, pero también temor. La organización temía ofender a la estrella y se instauró una cultura de secretismo y control.

Stephen A. Smith reacciona a la entrevista de Steve Ballmer con Ramona Shelburne a raíz del informe de Kawhi Leonard.
Secretos y Tensiones: La Gestión de la Salud de Leonard
La gestión de la salud de Leonard se convirtió en un tema delicado. En su primera temporada, los Clippers fueron multados por la NBA debido a comentarios inconsistentes con la verdadera condición física de Leonard. La liga reveló que sufría una lesión en el tendón rotuliano, lo que generó escalofríos en la organización. Este incidente recordó las tensiones con los Spurs y la importancia de mantener la confianza de Leonard.
La organización se dividió entre los que tenían acceso a la información y los que no. La salud de Leonard se convirtió en un secreto sagrado, y las comunicaciones públicas fueron sometidas a un intenso escrutinio. La constante tensión y el secretismo afectaron a algunos miembros del personal, quienes sentían que se había creado un ambiente de extrema cautela.
En enero de 2024, Leonard firmó una extensión de contrato por tres años y $153 millones. Sin embargo, una inflamación en la rodilla derecha en marzo de 2024 lo marginó de los últimos partidos de la temporada regular y limitó su participación en los playoffs. Esto marcó la cuarta postemporada consecutiva afectada por lesiones de Leonard.
La situación se complicó aún más cuando Leonard se sometió a un procedimiento en la rodilla que no se hizo público hasta meses después. Esto generó sorpresa y decepción en el equipo nacional de Estados Unidos, que lo había incluido en su lista para los Juegos Olímpicos de París.
La falta de transparencia sobre la salud de Leonard generó controversia y cuestionamientos sobre la dinámica interna del equipo.

Funcionarios del equipo de EE. UU. se enteraron a fines de junio de 2024 de que el equipo de Leonard no había sido sincero sobre un procedimiento que se había realizado en su rodilla a principios de mayo, casi dos meses antes.
Nuevas Acusaciones y Un Entorno de Control
En octubre de 2024, Randy Shelton, ex preparador físico de los Clippers, presentó una demanda contra el equipo y Lawrence Frank. Shelton alegó manipulación en la adquisición de Leonard y despido injustificado, en parte, por cuestionar la gestión de la salud de Leonard. También acusó a Robertson de negociar su contrato como agente sin licencia y de amenazarlo para obtener un porcentaje de su salario.
Los Clippers negaron las acusaciones, calificándolas de intento de extorsión. La demanda de Shelton también reveló que el equipo lo había excluido de reuniones e información sobre la salud de Leonard. Shelton afirmó que los Clippers violaron las reglas de manipulación en su intento de fichar a Leonard. Un ex empleado de los Clippers dijo que la demanda presenta nuevos problemas para el equipo.
El control sobre la información y la imagen de Leonard se hizo evidente durante los entrenamientos. El 7 de diciembre de 2024, Leonard fue visto entrenando, pero al notar la presencia de los medios, Robertson intervino para detener la filmación. Los medios fueron instruidos a contactar al equipo de Leonard para obtener información, lo que resaltó el poder de Robertson y el nivel de control que se ejercía.
El papel de Robertson en la vida de Leonard se ha vuelto más prominente, especialmente después de la muerte del padre de Leonard. Robertson se convirtió en su portavoz y guía, lo que consolidó su influencia en la organización.
El 3 de enero de 2025, Leonard fue inicialmente descartado para el partido contra los Atlanta Hawks. Sin embargo, pocas horas después, se anunció que podría jugar. El entrenador Tyronn Lue, quien había reemplazado a Rivers, optó por proteger la información sobre Leonard, utilizando respuestas evasivas para evitar revelar detalles sobre su estado físico.
A pesar de las restricciones de minutos, Leonard regresó a su mejor nivel. Desde el All-Star break hasta el final de la temporada regular, promedió 25.0 puntos, 6.8 rebotes y 3.5 asistencias.