Denny Hamlin Mantiene la Postura en la Batalla Legal de 23XI Racing Contra NASCAR
El propietario del equipo de carreras de NASCAR, Denny Hamlin, se mantiene firme a pesar de los recientes contratiempos en los tribunales, prometiendo que «todo será expuesto» en el juicio programado para diciembre. Esta declaración se produce en el marco de la demanda antimonopolio federal presentada por 23XI Racing contra la serie de carreras.
El pasado jueves, un juez federal rechazó una solicitud de 23XI Racing y Front Row Motorsports para seguir compitiendo con sus licencias mientras litigan contra NASCAR. Esta decisión implica que sus seis coches participarán como inscripciones abiertas este fin de semana en Dover, la semana siguiente en Indianápolis, y posiblemente por más tiempo. Los equipos argumentan que esta situación podría poner en riesgo su viabilidad económica.
El juez de distrito de los Estados Unidos, Kenneth Bell, denegó la solicitud de los equipos de una orden de restricción temporal, indicando que podrán competir en las próximas semanas y no perderán a sus pilotos o patrocinadores antes de su decisión sobre una orden judicial preliminar. El juez dejó abierta la posibilidad de reconsiderar su decisión si las circunstancias cambian en las próximas dos semanas.
Después de este fin de semana, los coches afectados podrían necesitar clasificarse por velocidad si se presentan 41 inscripciones, una posibilidad ahora que se han abierto lugares de salida.
La fecha del juicio está fijada para el 1 de diciembre, pero los dos equipos están luchando para ser reconocidos como poseedores de licencias para la temporada actual, a la cual le restan 16 carreras. Una licencia garantiza uno de los 40 puestos en la parrilla cada semana, además de una cantidad básica de dinero que se paga semanalmente.
«Si quieren respuestas, si quieren entender por qué está pasando todo esto, el 1 de diciembre obtendrán las respuestas que buscan», dijo Hamlin el sábado en el Dover Motor Speedway. «Todo será expuesto».
Denny Hamlin
23XI, copropiedad de la leyenda de la NBA Michael Jordan, y FRM presentaron su demanda federal contra NASCAR el año pasado después de ser las únicas dos organizaciones de 15 en rechazar la oferta de extensión de licencias de NASCAR.
Jordan y el propietario de FRM, Bob Jenkins, obtuvieron una orden judicial para reconocer a 23XI y FRM como poseedores de licencias para la temporada, pero la decisión fue revocada en apelación a principios de este mes, devolviendo el caso a Bell.
Hamlin, tres veces ganador de la Daytona 500 y piloto de Joe Gibbs Racing, es copropietario de 23XI junto con Jordan y afirmó que estaban preparados para enviar a Tyler Reddick, Bubba Wallace y Riley Herbst a la pista cada semana como equipos abiertos. Solicitaron la orden de restricción el lunes, alegando que a través del descubrimiento aprendieron que NASCAR planeaba comenzar inmediatamente el proceso de venta de las seis licencias, lo que pondría a «los demandantes en peligro irreparable de no recuperar sus licencias y quebrar».
Hamlin afirmó que ninguno de los contratiempos le ha hecho dudar de la decisión de presentar la demanda.
«El 1 de diciembre es lo único que importa. Marquen sus calendarios», dijo Hamlin. «Me encantaría estar haciendo otras cosas. Tengo muchas cosas en marcha. Cuando me suba al coche (hoy), nada más importará que eso. Siempre doy a mi equipo el 100%. Siempre me preparo, ya sea que tenga trabajos secundarios, trabajos paralelos, más hijos, todo eso importa, pero siempre le doy a mi equipo todo el tiempo que necesitan para asegurarme de que cuando me suba, esté comprometido al 100%».
Denny Hamlin
Reddick, que tiene una cláusula que le permite convertirse en agente libre si el equipo pierde su licencia, se negó a comentar el sábado sobre todas las preguntas relacionadas con su futuro y la demanda. Hamlin también se abstuvo de comentar sobre el futuro de Reddick con 23XI Racing.
Reddick, uno de los cuatro pilotos que quedan en el Desafío en Temporada de $1 millón de NASCAR, fue el campeón de la temporada regular del año pasado y compitió por el campeonato de la Cup Series en el final de temporada. Sin embargo, ninguno de los seis pilotos afectados por la decisión judicial está asegurado para los playoffs de este año.
No será un problema entrar en la carrera este fin de semana en Dover, ya que se han inscrito menos de los 40 coches máximos. Pero si 41 coches se presentan en algún lugar esta temporada, alguien lento será enviado a casa, lo que significa ingresos perdidos y una oportunidad perdida de ganar puntos en la clasificación.
«Nada cambia de mi parte, obviamente, y nada cambia dentro del taller», dijo el piloto de Front Row Motorsports, Zane Smith. «Normalmente ni siquiera hay suficientes coches para preocuparse por clasificarse».
Zane Smith
Smith, que ocupa el puesto 24 en la clasificación y probablemente necesitaría una victoria para clasificarse para los playoffs de NASCAR, dijo que apoyaba a Jenkins en su agria batalla legal que ha ensombrecido la serie de coches de stock durante meses.
«Dejo todo eso en sus manos», dijo Smith, «pero mi trabajo es obtener el mejor resultado posible con el coche 38».
