En una carrera llena de emociones y giros inesperados, Chase Elliott se alzó con la victoria en el Kansas Speedway, asegurando su lugar en la tercera ronda de los playoffs de la NASCAR. El piloto, partiendo desde la octava posición, protagonizó una remontada espectacular en las dos últimas vueltas de la carrera.
La competencia, marcada por múltiples banderas amarillas, parecía destinada a Denny Hamlin, quien dominó la mayor parte de la carrera. Sin embargo, una serie de contratiempos en las últimas vueltas le impidieron alcanzar su victoria número 60 en su carrera.
La carrera estuvo llena de incidentes, incluyendo una bandera roja tras el vuelco de Zane Smith, lo que preparó el escenario para un reinicio final en tiempo extra. En ese momento, Bubba Wallace y Christopher Bell luchaban por la victoria, hasta que Elliott irrumpió en escena.
¡Qué final tan loco! Espero que todos lo hayan disfrutado. Yo ciertamente lo hice.
Chase Elliott

Elliott, a bordo de un Chevrolet de Hendrick Motorsports, se une a Ryan Blaney como los pilotos clasificados para la tercera ronda. Tras la carrera de la próxima semana en Concord, Carolina del Norte, el grupo se reducirá de 12 a ocho competidores.
Hamlin, visiblemente decepcionado tras finalizar en segundo lugar, lamentó la pérdida de la victoria, que le habría asegurado un lugar en la siguiente fase y le habría permitido acercarse a su objetivo de alcanzar las 60 victorias en la Copa.
El podio lo completaron los compañeros de equipo de Hamlin, Christopher Bell y Chase Briscoe, quienes ocuparon el tercer y cuarto lugar respectivamente.
Wallace, a pesar de terminar quinto y de no lograr la victoria, se mostró satisfecho con su desempeño, considerando las dificultades que tuvo su coche al inicio de la carrera.
La próxima cita será una carrera de eliminación en el circuito mixto de Charlotte Motor Speedway. Los cuatro pilotos en riesgo de eliminación de los playoffs son Ross Chastain, Austin Cindric, Reddick y Wallace.