SEATTLE – La energía que Josh Naylor ha inyectado a los Marineros de Seattle en los últimos dos meses fue clave para su reciente éxito. Con un doblete de tres carreras en la octava entrada el martes por la noche, Naylor impulsó una victoria de remontada 4-3 sobre los Rockies de Colorado, asegurando el regreso de los Marineros a la postemporada y colocándolos al borde del título de división.
La última vez que los Marineros ganaron la Liga Americana del Oeste fue en 2001, un año marcado por 116 victorias en la temporada regular. Esa situación podría cambiar el miércoles, dependiendo de los resultados de los juegos restantes.
Tras asegurar su lugar en la postemporada por primera vez desde 2022, los Marineros celebraron y esperan alcanzar nuevas metas.
«Queremos ganar todo, y un gran campeonato al final», declaró Naylor, mientras celebraba con un cigarro en medio de la fiesta en el vestuario. «Con un gran desfile por la ciudad».
Josh Naylor
Seattle es la única ciudad de la MLB que aún no ha sido sede de un juego de la Serie Mundial, pero el equipo de este año genera esperanza de cara a octubre.
La victoria del martes fue la quinta consecutiva y la decimoquinta en 16 juegos, después de un período difícil. Este desempeño sigue a una barrida contundente en Houston, donde los Marineros nunca estuvieron en desventaja. Ahora, el equipo cree que lo mejor está por venir.
La rotación estelar de los Marineros, a pesar de la lesión de Bryan Woo, está dominando como se esperaba al inicio de la temporada. Su alineación, reforzada por las incorporaciones de Naylor y Eugenio Suárez, está produciendo resultados. Además, su bullpen luce formidable. En un año con debilidades en prácticamente todos los equipos, los Marineros se perfilan como uno de los más completos.
«Hay mucho trabajo por hacer, comenzando con la división», dijo Dan Wilson, el veterano receptor de los Marineros y mánager del equipo. «Esperamos lograrlo pronto y seguir adelante. Este equipo está listo y preparado».
Dan Wilson
En 2022, los Marineros ganaron 90 juegos y llegaron a los playoffs, poniendo fin a una sequía de 21 años. Sin embargo, fueron eliminados en la Serie Divisional. En 2023, quedaron fuera en septiembre y en 2024, perdieron una ventaja de 10 juegos en la división.
«Estos últimos dos años han sido muy largos», comentó Cal Raleigh, receptor de los Marineros. «No volver, ha sido doloroso. Mucho dolor».
Cal Raleigh
Algunos jugadores creen que esa lucha sirvió para fortalecer al equipo.
«Esos años sirvieron para fortalecernos», dijo Julio Rodríguez, jardinero central de los Marineros. «Para ponernos en una mejor posición. Para crecer».
Julio Rodriguez
Raleigh en un momento abrazó al presidente de operaciones de béisbol de los Marineros, Jerry Dipoto, lamentando la mala actuación del equipo durante ocho entradas, pero luego cambió el enfoque: «Vamos a ganar la Serie Mundial», recordó Raleigh haber dicho.
Durante siete entradas, la ofensiva de los Marineros tuvo dificultades contra el cuerpo de lanzadores de los Rockies, que tienen el promedio de carreras limpias más alto de la liga. Iban perdiendo 3-1 al inicio de la octava, pero el relevista de los Rockies, Juan Mejía, inició la entrada golpeando a Luke Raley. J.P. Crawford recibió una base por bolas, pero Randy Arozarena y Raleigh se poncharon. Rodríguez luego recibió un pelotazo en el codo izquierdo, llenando las bases.
Tres lanzamientos después, Naylor, quien ha bateado .292/.333/.486 desde que llegó de los Diamondbacks de Arizona, conectó un lanzamiento en cuenta de 2-0, enviando la pelota al jardín central-izquierdo, anotando a Rodríguez desde primera base.
«Se sintió como dos segundos», dijo Rodríguez. «Tan pronto como lo vi batear la pelota, comencé a correr».
Julio Rodriguez
Andrés Muñoz, el cerrador de los Marineros, completó la novena entrada, desatando la alegría en el T-Mobile Park, con una asistencia de 35,925 aficionados. Los Marineros mejoraron su récord a 49-27 en casa. Su ventaja sobre los Astros se extendió a cuatro juegos con cinco restantes. La ventaja sobre los Guardianes de Cleveland y los Tigres de Detroit, empatados en la AL Central, es de tres juegos para un pase directo a la primera ronda.
Ha pasado casi un cuarto de siglo desde que los Marineros ganaron un juego de playoffs en casa.
Quieren ganar tantos como puedan este año.
«Queremos jugar en casa», dijo Rodríguez. «No quiero dejar mi barrio para jugar».
Julio Rodriguez
