Raja Jackson, hijo de la leyenda de las MMA, Quinton «Rampage» Jackson, se declaró no culpable de los cargos criminales derivados de una agresión en un evento de lucha libre profesional en agosto, en Los Ángeles.
Jackson, de 25 años, se declaró no culpable en su audiencia de lectura de cargos el jueves, por un cargo de agresión con agravantes que causó lesiones corporales graves y un cargo de agresión menor. La sentencia por agresión con agravantes conlleva una pena de hasta cuatro años de prisión estatal, pero la fiscalía del distrito de Los Ángeles está buscando una mejora de la sentencia que podría extenderla a siete años.
Su próxima comparecencia ante el tribunal está programada para el 24 de noviembre.
La agresión tuvo lugar durante un evento de KnokX en Los Ángeles. Jackson, quien debía aparecer en un combate escenificado, arrojó al luchador Stuart Smith (también conocido como Syko Stu) al suelo y continuó golpeándolo varias veces, incluso después de que quedara claro que estaba inconsciente. Jackson no cedió hasta que fue físicamente restringido por varios otros luchadores.
En una transmisión en vivo antes de entrar en el ring, Jackson dijo que tenía la intención de vengarse de Smith por un breve altercado entre los dos ese mismo día. Smith había golpeado a Jackson con una lata de cerveza en un aparente altercado para promocionar el evento.
Según Smith, sufrió múltiples lesiones en la mandíbula durante el ataque, así como una lesión grave en la cabeza, una laceración en el labio y la pérdida de dientes.
Jackson fue arrestado en septiembre y puesto en libertad bajo fianza de 50.000 dólares. Su padre, quien compitió en la UFC y en los campeonatos de lucha Pride, ha condenado las acciones de su hijo en múltiples entrevistas y en redes sociales.
