Xander Bogaerts, el reconocido campocorto de los Padres de San Diego, se encuentra entre los jugadores que esperan con ansias la implementación del nuevo sistema de desafíos para bolas y strikes en la próxima temporada de la MLB.
Sin embargo, Bogaerts lamenta que esta tecnología no estuviera disponible antes, especialmente después de una jugada clave en el juego contra los Cachorros.
En el tercer juego de la Serie de Comodines de la Liga Nacional, Bogaerts fue ponchado tras un lanzamiento que pareció estar fuera de la zona de strike. Este incidente ocurrió en la novena entrada, en un momento crucial del encuentro.
Los Cachorros lideraban 3-0. Jackson Merrill conectó un jonrón para reducir la ventaja de San Diego a 3-1, lo que llevó a Bogaerts al plato. Con cuenta de 3-2, un lanzamiento de 97 mph de Brad Keller aparentemente se desvió de la zona, lo que provocó la incredulidad de Bogaerts y la rápida reacción del mánager Mike Shildt.
Tras este incidente, Keller golpeó a Ryan O’Hearn y Bryce Johnson. Si Bogaerts hubiera recibido base por bolas, las bases se habrían llenado sin outs. Andrew Kittredge entró al juego y logró retirar a los dos bateadores siguientes, asegurando la victoria de los Cachorros.
¿De qué quieres que hable ahora? Fue bola. Arruinó todo el juego, ¿sabes? No puedo volver atrás, y hablar de eso ahora no cambiará nada. Fue malo, y gracias a Dios por el ABS el próximo año, porque esto es terrible.
Xander Bogaerts
El sistema automatizado de bolas y strikes se implementará en las Grandes Ligas la próxima temporada, tras años de pruebas en las ligas menores y en el Juego de Estrellas de este año. El comité de competición de la MLB votó el mes pasado para otorgar a los equipos dos desafíos por juego utilizando el ABS si creen que una llamada del árbitro es incorrecta.
La derrota empañó una temporada de 90 victorias para San Diego, que llegó a los playoffs por cuarta vez en seis temporadas.
Bogaerts resumió la temporada con estas palabras:
