Terence Crawford demostró una vez más que el tamaño no es un factor determinante, ofreciendo una clase magistral para derrotar a Canelo Álvarez por decisión unánime y convertirse en el campeón indiscutido de peso supermediano el sábado por la noche en el Allegiant Stadium.
Los jueces puntuaron la pelea 116-112, 115-113 y 115-113.
Con esta victoria, Crawford (42-0, 31 KOs) se convirtió en el primer boxeador masculino en la era de los cuatro cinturones en ser campeón indiscutido en tres categorías de peso. Lo logró con estilo frente a una multitud de 70,482 personas, la mayoría de ellas seguidores de Álvarez, y millones más que siguieron la pelea en vivo a través de Netflix.
Después de conquistar títulos mundiales en cuatro divisiones de peso, incluyendo el estatus de indiscutido en peso superligero y welter, Crawford, quien cumplirá 38 años en dos semanas, hizo el audaz salto de 154 a 168 libras para destronar a la estrella más grande del boxeo.
Le dije a todos que no estoy aquí por coincidencia. Dios me bendijo. Él hizo este evento y esta noche solo para mí. Y se los he estado diciendo. No es mi culpa. Es de Dios.
Terence Crawford
A pesar de las tarjetas ajustadas, la sensación fue que Crawford ganó por un margen más amplio, frustrando repetidamente a Álvarez (63-3-2, 39 KOs) y dejando a la estrella mexicana tan perdido como cuando fue derrotado por Floyd Mayweather Jr. en 2013. Álvarez, de 35 años, ha mejorado significativamente desde entonces, pero Crawford simplemente fue un mejor boxeador, siempre uno o dos pasos por delante.
Crawford superó a Álvarez en golpes totales, 115-99, y en jabs, 45-16. Superó a Álvarez cuando más importaba, con el momento más revelador en el undécimo asalto, cuando un simple jab de Crawford obligó a Álvarez a retroceder y negar con la cabeza, incrédulo.
La diferencia de tamaño dominó la conversación antes de la pelea, y aunque ambos peleadores pesaron 167.5 libras el viernes, la expectativa era que el poder y la fuerza de Álvarez abrumarían a Crawford.
Eso no sucedió.
Soy un ganador por estar aquí. He hecho todo en mi carrera. He venido a tomar riesgos, y eso es lo que hice. Tomo riesgos.
Canelo Álvarez
Pero fue Crawford quien corrió el mayor riesgo al subir a 168 libras, cuando casi todos, incluso su oponente, dijeron que era demasiado para superar.
La actuación estuvo a la altura de la demolición de Errol Spence Jr. en 2023 para convertirse en el campeón indiscutido de peso welter. Aunque no fue tan violenta, fue casi perfecta contra uno de los mejores peleadores de esta era.
El boxeador de Omaha, Nebraska, Crawford utilizó el movimiento al principio para desequilibrar a Álvarez, mantuvo un jab activo y eligió sus momentos con combinaciones duras durante los 36 minutos de combate. Crawford estuvo concentrado desde el principio, mientras que Álvarez buscaba acorralar a su oponente. Pero el movimiento de Crawford impidió que Álvarez entrara y conectara sus potentes golpes. En cambio, Álvarez se encontró en el extremo receptor de las combinaciones de Crawford. Crawford comenzó a aumentar el ritmo en el cuarto asalto, encadenando golpes y escapando del peligro.
Álvarez, el orgullo peleador de Guadalajara, México, tuvo éxito al golpear al cuerpo con la esperanza de frenar a Crawford. Sin embargo, el movimiento de Crawford impidió que Álvarez estableciera sus pies y lanzara combinaciones significativas. Para el séptimo asalto, Crawford decidió quedarse en el bolsillo y cambiar golpes con Álvarez, lo que pareció tomarlo por sorpresa. Álvarez comenzó a mostrar visiblemente la frustración en su rostro cuando Crawford conectaba combinaciones en su cabeza y se alejaba.
Crawford no se durmió en los laureles y en los asaltos de campeonato, superando a Álvarez en el golpe. Muchos fanáticos se dirigieron a la salida antes de que se anunciara la decisión.
Para aquellos que se quedaron y abuchearon fuertemente a Crawford, esos abucheos se convirtieron en vítores de agradecimiento por el brillante boxeo del mejor de Omaha. Puede que no le quede mucho por hacer a Crawford en su carrera, pero se negó a comprometerse con el retiro.
No lo sé. Tengo que sentarme con mi equipo y vamos a hablar de ello.
Terence Crawford
Si esta es la última vez que Crawford sube a un ring, se debe tener una seria conversación sobre su lugar entre los más grandes boxeadores de todos los tiempos.
