Fallece Ron Taylor, Leyenda del Béisbol y Médico de los Blue Jays
El mundo del béisbol lamenta la pérdida de una de sus figuras más emblemáticas. El Dr. Ron Taylor, campeón de la Serie Mundial con los Cardenales de San Luis y los Mets de Nueva York, y posteriormente médico de los Azulejos de Toronto, falleció este lunes 16 de junio en Toronto tras una larga enfermedad. Tenía 87 años.
Nacido en Toronto y miembro del Salón de la Fama del Deporte Canadiense, Taylor dejó una huella imborrable tanto en el campo como fuera de él.
Con una trayectoria de 11 temporadas en las Grandes Ligas, Taylor se destacó como relevista, demostrando su valía en momentos cruciales.
Fue pieza clave en los campeonatos de los Cardenales en 1964 y de los históricos «Miracle Mets» de 1969. En esta última temporada, sus números fueron impresionantes: 59 apariciones, 13 salvamentos, un récord de 9-4 y una efectividad de 2.72.
Ron era el único en nuestro equipo con experiencia en postemporada. Había ganado un campeonato con los Cardenales y aportó una mentalidad ganadora. No ganamos el título sin Ron Taylor.
Art Shamsky, excompañero en los Mets
En la Serie Mundial de 1969, Taylor brilló con 2.1 entradas sin permitir carreras, incluyendo un salvamento crucial en el segundo juego, donde ponchó al legendario Brooks Robinson con dos corredores en base.
Taylor debutó en MLB con Cleveland en 1962 y también jugó para Houston, San Diego y los Mets. En su carrera, acumuló 491 juegos, con un récord de 45-43, 74 salvamentos y una efectividad de 3.93. Su desempeño en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional de 1969 contra Atlanta incluyó un salvamento y una victoria en los dos primeros encuentros.
Tras su exitosa carrera en el béisbol, Taylor se graduó de medicina. Posteriormente, dedicó cerca de 30 años como médico de los Toronto Blue Jays, uniendo su pasión por el deporte con su vocación de servicio.
El legado de Ron Taylor es un testimonio de excelencia deportiva y servicio médico, un ejemplo de cómo la dedicación y el espíritu competitivo pueden trascender el campo de juego.