Pacquiao vs. Barrios: Análisis del Retorno del Ícono del Boxeo

alofoke
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Manny Pacquiao Regresa al Ring: ¿Un Reto Imposible?

El legendario Manny Pacquiao, a sus 46 años, anuncia su regreso al boxeo, apenas un mes después de su inducción al Salón Internacional de la Fama. El único campeón mundial en ocho divisiones regresa al cuadrilátero en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas para enfrentarse al campeón welter del CMB, Mario Barrios, de 30 años.

Este combate representa un desafío significativo para Pacquiao, tras un largo período de inactividad. Barrios, quien obtuvo el título interino del CMB en septiembre de 2023 y lo defendió exitosamente en mayo de 2024, fue ascendido a campeón absoluto antes de su pelea contra Abel Ramos. Barrios, con una altura considerable para la división, sufrió una caída ante Ramos en el sexto asalto, pero logró ganar por decisión dividida.

A pesar de ello, Barrios cuenta con un impresionante historial entre los campeones de las 147 libras. Venció a Yordenis Ugas en 2023, quien derrotó a Pacquiao en agosto de 2021, resultado que llevó al retiro al ícono filipino. Barrios también ha compartido el ring con figuras de élite como Keith Thurman y Gervonta «Tank» Davis, quienes lo derrotaron pero le brindaron valiosa experiencia. Aun así, Barrios podría ser considerado el eslabón más débil entre los actuales campeones de peso welter, lo que podría explicar la motivación de Pacquiao para regresar. Este retorno no se trata solo de un pago, sino de añadir más logros a su legado.

En julio de 2019, Pacquiao se convirtió en el campeón de peso welter de mayor edad, a los 40 años, tras vencer a Thurman. Ahora busca superar a Bernard Hopkins, uno de los grandes del boxeo, como el campeón mundial más veterano. Hopkins derrotó a Jean Pascal en 2011 a los 46 años por el título semipesado del CMB, y luego, a los 48, venció a Tavoris Cloud por el cinturón de la FIB. El segundo campeón de mayor edad fue George Foreman, quien recuperó el título de peso pesado a los 45 años al noquear a Michael Moorer en 1994.

Sin embargo, existe una diferencia crucial entre lo logrado por «Big George», lo que hizo Hopkins y lo que Pacquiao intenta: Hopkins se mantuvo activo durante sus últimos años, y Foreman estuvo activo durante 10 años en su regreso al título de peso pesado. Pacquiao (62-8-39 KOs) ha estado fuera del ring por más de cuatro años. No ha tenido combates de preparación, solo un par de exhibiciones en 2022 y una en 2024. Volver a enfrentarse a un campeón hambriento como Barrios, quien es naturalmente más grande, más largo (con un alcance de 71 pulgadas) y más fuerte, hace que el intento de Pacquiao sea alarmante e histórico.

La Perspectiva del Rival: Enfrentando a Pacquiao

Tuve el privilegio de compartir el ring con Pacquiao en tres ocasiones: 2012, 2014 y 2016. Cada encuentro me brindó una experiencia única, influenciada por su etapa en su carrera y la mía. En 2012, Pacquiao se encontraba en la cima de su ilustre carrera. No había perdido en siete años y venía de derrotar a grandes nombres del boxeo. Al subir al ring por primera vez, sentí que me enfrentaba a un titán. Más allá de la magnitud del evento, me encontré cara a cara con un hombre carismático y humilde, cuya voz suave y comportamiento respetuoso creaban un contraste notable con lo que vería esa noche.

Los anuncios en el ring parecieron más cortos que en cualquier otra pelea de campeonato. Mis piernas temblaban incontrolablemente, pero al detenerme, se entumecían. De pie frente a Pacquiao, sentí el peso de su presencia. Su aura era intensa, casi debilitante.

Pacquiao es, sin duda, el atleta más excepcional con el que he compartido el ring. Cada movimiento era preciso y deliberado. Su juego de pies y fintas me mantenían en vilo, sin saber cuándo lanzaría sus combinaciones. Su velocidad de manos era engañosa, y su capacidad para cambiar el ritmo hacía que todo fuera más difícil.

Lo que parecía manejable en los estudios de vídeo se volvía abrumador en la vida real. Su primer paso a media distancia era como un rayo, y en el instante en que soltaba sus manos, todo se volvía caótico. Aprendí que el público es su fuente de energía. Cuanto más les daba para celebrar, más feroz se volvía.

Pacquiao era más difícil de golpear de lo que esperaba. Su poder era asombroso; cada golpe conectado enviaba una sacudida a mi cabeza, y hasta los que fallaban cortaban el aire como balas. Cuando lograba conectar, él aplaudía en señal de desafío. Su resistencia era increíble. Lo que realmente lo distinguía era su tenacidad y su inteligencia en el ring. Intentar repetir un patrón de golpes dos veces significaba recibir un contraataque explosivo desde un ángulo impredecible.

Lo que hacía a Pacquiao especialmente peligroso era su capacidad para detectar cuándo su oponente se estaba cansando. Lo sentía y entonces intensificaba el ritmo. Su fuerza era inusual para su tamaño.

Hay que ser claros: el juego B, C y D de Pacquiao es mejor que el juego A de la mayoría de los boxeadores. Los boxeadores especiales como él no se fabrican, nacen. Pero 46 años siguen siendo 46.

Cómo Podría Desarrollarse la Pelea: Atletismo vs. Gancho Izquierdo

Se espera que Pacquiao busque una pelea intensa desde el primer asalto, presionando y acortando la distancia con fintas, movimientos de cabeza y combinaciones, aprovechando su agilidad. En los entrenamientos, Pacquiao aún muestra destellos de su legendaria velocidad y juego de pies. Intentará explotar con ráfagas rápidas y cambios de ángulo antes de que Barrios pueda reaccionar.

Pacquiao, siendo más bajo, sabe que no puede pelear a larga distancia, donde Barrios se siente cómodo con su jab, rectos de derecha y ganchos. Para neutralizarlo, Pacquiao debe acortar la distancia y atacar el torso de Barrios. Estos golpes al cuerpo son cruciales para disminuir la movilidad de Barrios, agotar su resistencia y reducir su precisión.

Ser zurdo le da a Pacquiao una ventaja táctica. Barrios no ha enfrentado muchos zurdos en su carrera, y la última vez que lo hizo, contra Davis en 2021, recibió golpes en el cuerpo y la cabeza. Es probable que Pacquiao intente replicar ese éxito, utilizando fintas para enmascarar su golpe característico, el gancho de izquierda, que disimula con movimientos de cabeza.

Pero esta pelea no estará exenta de riesgos para Pacquiao. Su atletismo, que antes era su mayor fortaleza, ahora lo hace vulnerable. A medida que se envejece, el tiempo y el equilibrio no siempre se alinean a la perfección. Barrios, con su contraataque y disciplina, podría capitalizar esos errores.

Barrios probablemente se mantendrá tranquilo al principio, permitiendo que Pacquiao marque el ritmo. Empezará con un jab constante, buscando dañar el rostro de Pacquiao y romper su ritmo. Barrios buscará el momento oportuno para sus contraataques, en particular el golpe de derecha, que ha sido un problema para Pacquiao a lo largo de su carrera.

El gancho izquierdo de Barrios podría ser un factor decisivo, especialmente al cuerpo. Pacquiao ha tenido problemas con calambres en las pantorrillas a lo largo de su carrera, y si Barrios se enfoca en el cuerpo, podría afectar la fuerza y la agilidad de Pacquiao. A medida que avance la pelea, el ritmo de Pacquiao podría disminuir. Su energía inicial probablemente se agotará, y Barrios tendrá oportunidades para tomar el control, manteniendo el jab y controlando la distancia.

Pacquiao en Declive: Un Análisis Numérico

A medida que los boxeadores envejecen, a menudo se observa una disminución, no solo en los niveles de actividad, sino también en la precisión, los reflejos y la recuperación. Los boxeadores mayores pueden volverse más técnicos, asumiendo menos riesgos y confiando en la experiencia. Pero con esa cautela calculada viene una menor producción y menos capacidad física para adaptarse.

En su pelea contra Ugas, Pacquiao no solo parecía un paso atrás, sino que parecía haber envejecido de la noche a la mañana. La precisión y el contraataque de Ugas expusieron el desgaste de una larga carrera. El juego de pies y el tiempo de Pacquiao, que antes eran perfectos, parecían obsoletos. El alcance, el poder y los pies firmes de Ugas demostraron ser demasiado para el ícono.

Ugas superó a Pacquiao en golpes totales (151-130), jabs (50-42) y golpes de poder (101-88). Ugas conectó el 59% de sus golpes de poder. Por primera vez, se hizo innegable que Pacquiao finalmente había llegado al límite que todos los grandes boxeadores alcanzan. Cuatro años después, imaginar un resurgimiento de Pacquiao no es fácil. El tiempo no se ha detenido. Barrios es 16 años más joven, más preciso y fresco. Y sin duda tiene experiencia.

Barrios posee muchas características que dificultaron a Pacquiao contra Ugas, como un juego de pies constante, sincronización precisa, un excelente jab y la energía de la juventud. No se dejen engañar por los vídeos en redes sociales. Es una cosa lucir bien en el gimnasio, pero es otra batalla distinta cuando tu cuerpo suplica recuperación y ésta ya no llega tan rápido. El tiempo de reacción se vuelve más lento y la recuperación se alarga a medida que envejecemos.

Sí, Pacquiao aún tiene el corazón de un guerrero y dará todo lo que le queda, pero el tiempo es implacable. Incluso su espíritu de guerrero podría no ser suficiente para superar a este campeón elegido en la división de peso welter.

¿Quién Ganará?

Esta no será una pelea fácil para Pacquiao ni para Barrios. Pacquiao tendrá sus momentos, tal vez incluso sacuda a Barrios con combinaciones, y su velocidad le dará rounds. Sin embargo, a medida que avancen los 12 asaltos y Pacquiao disminuya su ritmo, el alcance de Barrios, sus precisos contraataques y su determinación demostrarán que Pacquiao es superable en esta etapa de su carrera. En última instancia, Barrios ganará por decisión unánime, no por dominio, sino por hacer lo que necesita hacer esa noche. Vencerá a una leyenda, pero ya fuera de su mejor momento.

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