BRIGHTON, Inglaterra – Nueva Zelanda protagonizó una contundente victoria en la Copa Mundial Femenina al derrotar a Irlanda con un marcador de 40-0 el sábado.
En lo que se considera el encuentro más esperado de la fase de grupos, las Black Ferns demostraron su superioridad. Irlanda, aunque mostró espíritu de lucha, no pudo igualar el desempeño de las cinco veces campeonas.
Irlanda aceptó el desafío del haka de Nueva Zelanda, avanzando antes de que ambos equipos mantuvieran una tensa confrontación que encendió a la afición pro-Irlanda.
Cuanto más grandes son, más dura es la caída.
Un aficionado irlandés
Irlanda comenzó el partido con gran energía, dominando los primeros minutos, pero no logró convertir esa ventaja en puntos, lo que permitió a Nueva Zelanda mantenerse en juego.
Las Black Ferns mantuvieron la calma y anotaron su primer try a los 15 minutos. Tras un fallo de la irlandesa Dannah O’Brien, Nueva Zelanda aprovechó la oportunidad, pasando el balón a Stacey Waaka, quien anotó el primer try del partido.
Poco después, llegó el segundo try, cortesía de Chryss Viliko. Nueva Zelanda demostró su dominio, aprovechando al máximo sus oportunidades y aumentando la presión. La situación de Irlanda empeoró cuando la fullback Stacey Flood tuvo que abandonar el campo lesionada.
Nueva Zelanda continuó dominando los momentos clave, con un ataque preciso y jugadores veloces. Braxton Sorensen-McGee, de 18 años, anotó el tercer try antes del descanso, demostrando su velocidad y habilidad.
En la segunda mitad, Irlanda tuvo un mejor inicio, pero Nueva Zelanda fue la que anotó primero. Sorensen-McGee, una vez más, encontró espacio para ampliar la ventaja. Irlanda luchó, pero no logró sumar puntos.
Aunque Irlanda sacará lecciones del partido, se enfrentó a la implacable máquina de las Black Ferns, que demostraron ser superiores. Sorensen-McGee completó su segundo hat-trick con dos minutos por jugar, esta vez tras una jugada por la banda izquierda.
Jorja Miller rompió por la banda derecha y pasó el balón a Maia Joseph, quien anotó después de los 80 minutos. La conversión de Renee Holmes elevó el marcador a 40-0.