Inglaterra se Corona en el Mundial Femenino de Rugby 2025
El Mundial Femenino de Rugby 2025 ha llegado a su fin. Inglaterra cumplió con las expectativas, asegurando su tercer título en Twickenham frente a casi 82,000 aficionados, estableciendo un récord para un partido femenino de rugby XV. La jornada fue memorable tanto dentro como fuera del campo.
Canadá, que en parte financió su participación en el torneo a través de crowdfunding, logró llegar a la final, lo cual ya era un triunfo en sí mismo.
A continuación, analizamos el futuro del rugby femenino y qué le espera a las victoriosas «Red Roses».
¿Son Inglaterra la fuerza dominante en este deporte?
Inglaterra ha demostrado una dominancia notable, con una sola derrota en sus últimos 63 partidos, precisamente en la final de 2022. Desde entonces, han mantenido una racha impresionante y han asegurado el mayor premio del deporte. Actualmente, las «Red Roses» son la fuerza más dominante en el rugby.
El equipo inglés se sitúa entre los mejores de la era moderna, comparable a los Springboks en los últimos ocho años y los All Blacks entre 2011 y 2016, ambos ganadores de Copas del Mundo consecutivas. Las Black Ferns, con seis títulos mundiales femeninos, también son un referente.
La diferencia entre las «Red Roses» y sus competidoras es significativa, superando a muchos equipos en desarrollo, algunos de los cuales aún son amateurs o semiprofesionales. La forma en que manejaron las expectativas este año también fue destacable.
Los aficionados fueron parte fundamental del torneo. La atmósfera generada por los seguidores fue inolvidable, especialmente en el partido inaugural contra Estados Unidos en Sunderland.
La historia inspiradora de Samoa también merece ser recordada. Los jugadores y el personal, que dedicaron tiempo fuera de sus trabajos de tiempo completo para representar a su país, iluminaron el torneo con su espíritu y momentos memorables. El empate 31-31 entre Australia y Estados Unidos también destacó, con ambos equipos luchando por un lugar en la final.
¿Qué sigue para el rugby femenino?
El torneo ha demostrado el potencial del deporte y lo que se puede lograr cuando un país se toma en serio el torneo. Se necesita una inversión generalizada para que el crecimiento sea sostenible. Inglaterra, con un financiamiento superior, ha demostrado lo que se puede lograr. Ahora, otros equipos deben igualar ese esfuerzo, lo que requiere apoyo comercial, más partidos competitivos y una inversión desde la base.
Es crucial que el trabajo no se detenga. Las uniones deben invertir en programas femeninos para obtener resultados, como lo hizo Inglaterra. Este es un momento decisivo para el juego, que necesita seguimiento. Las naciones de origen, así como Nueva Zelanda y Australia, corren el riesgo de que la brecha con Inglaterra se amplíe si no invierten en los programas nacionales y sus respectivas competiciones.
¿Qué sucederá en 2029?
Es probable que Inglaterra vuelva a ser la favorita. Con una plantilla joven y la infraestructura adecuada, están bien posicionadas para aspirar a otro Mundial. Se espera que otras naciones mejoren su rendimiento. Canadá, a pesar de su presupuesto limitado, ha demostrado su potencial. Las Black Ferns también serán contendientes fuertes.
Australia buscará destacar como anfitriona, y Francia y otros equipos seguirán compitiendo. Se espera que el Mundial de Australia sea aún más grande y que el interés continúe creciendo en los próximos cuatro años. Por ahora, las «Red Roses» son las favoritas.
El éxito del torneo de 2025 se debe en gran parte al éxito de Inglaterra. Rugby Australia tiene un papel importante que desempeñar dentro y fuera del campo en los próximos cuatro años. Necesitan el apoyo del público australiano, lo cual se logra ganando. También necesitan organizar la mayor cantidad posible de partidos en casa y aumentar su base de seguidores. Es probable que Inglaterra apunte a ganar de nuevo.
