El capitán europeo, Luke Donald, mantuvo un perfil bajo tras la reciente victoria de su equipo en la Ryder Cup. Donald, quien lideró a Europa hacia su primer triunfo como visitante desde 2012, se mostró cauteloso al reflexionar sobre su futuro en el torneo.
La victoria, lograda en Bethpage Black, llegó en circunstancias dramáticas, con un ajustado marcador de 15-13. Estados Unidos, tras una desventaja inicial de siete puntos, protagonizó una remontada que mantuvo la emoción hasta el final.
Tras el triunfo, los jugadores celebraron y corearon «dos años más» en apoyo a su capitán. Sin embargo, Donald, cuyo lugar en la historia del torneo ya está asegurado, no hizo promesas sobre su continuidad.
Donald, de 47 años, quien también ganó en sus cuatro participaciones como jugador, se limitó a decir: «¡Mi respuesta es que voy a disfrutar esta noche!».
El capitán europeo no dejó ningún detalle al azar en la preparación del equipo, y sus decisiones tácticas resultaron acertadas. Jon Rahm, quien contribuyó con tres puntos, elogió la labor de Donald.
Hay muchas cosas que Luke ha hecho de manera excepcionalmente profesional, tan perfecto. Es el capitán de este barco y nos ha liderado mejor de lo que puedo imaginar. Ha establecido un estándar muy alto para los futuros capitanes.
Jon Rahm
Donald reveló el nivel de detalle que aplicó en la preparación del equipo. Utilizó cascos de realidad virtual para simular el ambiente hostil que encontrarían.
Su planificación fue más allá, considerando aspectos como la ropa de cama y el aroma del champú.
Mi trabajo es, literalmente, dar a estos chicos una mejor oportunidad de ganar. Puede ser tan simple como algunas cosas muy pequeñas.
Luke Donald
Como ejemplo, Donald mencionó que se modificaron las habitaciones del hotel, se cambió el champú y la ropa de cama para mejorar el descanso de los jugadores.
Ludvig Aberg fue el único jugador europeo en ganar un partido individual. Los estadounidenses lograron seis puntos completos. Los restantes puntos europeos se obtuvieron en empates, después de que figuras como Rory McIlroy, Tommy Fleetwood, Justin Rose y Rahm perdieran sus encuentros.
El partido entre Viktor Hovland y Harris English terminó en empate debido a la lesión del noruego, mientras que Matt Fitzpatrick se impuso a Bryson DeChambeau en el hoyo 18. Shane Lowry, en el octavo partido, logró el putt decisivo para asegurar la copa. Los empates de Tyrrell Hatton y Robert MacIntyre completaron el triunfo.