En un caluroso día de julio en Hollywood, una multitud se agolpa afuera de Nat Thai Food, ubicado en el centro comercial Freddie Roach Square. La gente no solo busca la deliciosa comida; esperan la llegada de Manny Pacquiao, el único campeón mundial de boxeo en ocho divisiones, figura política y el atleta más famoso de Filipinas.
Pacquiao, conocido por frecuentar este restaurante después de entrenar en el legendario gimnasio Wild Card Boxing de Roach, regresa a un lugar familiar. Han pasado cuatro años desde que entrenó allí, y la expectación es palpable.
Los fanáticos exhiben fotos y guantes de boxeo, ansiosos por ver a la leyenda en acción. Su regreso al cuadrilátero contra el campeón de peso wélter del CMB, Mario Barrios, en Las Vegas, es inminente.
“Vuelvo porque el boxeo es mi pasión. Es en lo único que pienso y realmente me gusta hacer historia”, declaró Pacquiao.
Manny Pacquiao
A sus 46 años, Pacquiao busca romper su propio récord como el boxeador de mayor edad en ganar un título mundial de peso wélter. Un logro que ya obtuvo al vencer a Keith Thurman a los 40 años en 2019.
El 8 de junio, fue incluido en el Salón de la Fama del Boxeo Internacional, y si derrota a Barrios, se convertiría en el primer boxeador en ganar un título mundial importante después de su inducción.
En el gimnasio Wild Card, bajo la atenta mirada de Freddie Roach, Pacquiao se prepara para esta pelea. Roach, quien ha entrenado a campeones como Miguel Cotto y Amir Khan, observa con la misma pasión que sintió en 2001, cuando Pacquiao, entonces desconocido, le pidió que fuera su entrenador.
“En mayo de 2001, fuimos a San Francisco solo de vacaciones y nos quedamos aproximadamente un mes y medio. Pero terminamos visitando algunos gimnasios en el área de la Bahía. Luego tomamos un autobús Greyhound hacia Los Ángeles y preguntamos si había un gimnasio de boxeo y nos señalaron el Wild Card”, recordó Pacquiao.
Manny Pacquiao
Roach quedó impresionado desde el primer momento. Menos de una semana después, Pacquiao aceptó una pelea con solo dos semanas de anticipación contra Lehlo Ledwaba por el título de peso súper pluma de la FIB en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas.
El comentarista Jim Lampley recuerda cómo Pacquiao, con dificultades para expresarse en inglés, transmitía su mensaje. Esa noche, Pacquiao sorprendió a todos al derrotar a Ledwaba en el sexto asalto, ganando su segundo título mundial en ocho categorías de peso.
“Una vez que Manny venció a Ledwaba, Wild Card parecía la sede del club de fans de Manny Pacquiao”, relató Roach. “Sus fanáticos son amigables pero implacables. Se congregaban en el estacionamiento para verlo cuando llegaba, almorzaban al lado, compraban camisetas y se marchaban. Es realmente asombroso lo que sucede aquí cuando Manny está en la ciudad para entrenar para una pelea”.
Veinticuatro años después, los fanáticos siguen mostrando su apoyo, y Pacquiao, con la misma determinación, se prepara para el combate.
“Siento que estoy empezando de nuevo. Me apasiona tanto y el fuego vuelve a arder dentro de mí. El otro día hice 30 asaltos de sparring y Freddie tuvo que intervenir para que dejara de entrenar”, dijo Pacquiao.
Manny Pacquiao
Sin embargo, el desafío es considerable: un boxeador de 46 años, saliendo del retiro, buscando un campeonato mundial. Pacquiao explica que los cuatro años le permitieron recuperarse físicamente y concentrarse en su carrera política en Filipinas.
Chris Algieri, ex rival de Pacquiao, sugiere que una pelea de preparación podría haber sido beneficiosa. En su última pelea contra Ugas, Pacquiao pareció menos explosivo, conectando solo el 16% de sus golpes. Pacquiao atribuyó su desempeño a distracciones externas y problemas físicos.
“No estaba realmente al 100% concentrado porque tenía una demanda en curso con Paradigm Sports Management. Hubo muchas distracciones y me molestaron durante todo el campo de entrenamiento. En la noche de la pelea, no podía moverme porque me daban calambres en las piernas, y eso me decepcionó porque Ugas era el oponente más fácil de mi carrera. Perdí solo porque no podía moverme como quería”, explicó Pacquiao.
Manny Pacquiao
Jim Lampley reconoce que, aunque la lógica sugiere un posible deterioro, Pacquiao es capaz de desafiar las expectativas.
Pacquiao asume un riesgo significativo al enfrentarse a un oponente más joven y poderoso, pero lo considera calculado, motivado por la oportunidad que vio en las peleas recientes de Barrios.
Algieri cree que Barrios es un rival adecuado para Pacquiao, ya que su estilo podría favorecer al filipino.
Barrios, al enterarse de que Pacquiao lo había elegido, sintió tanto respeto como desconfianza, entendiendo que su título estaba en juego.
Para regresar, Pacquiao contó con el apoyo de su esposa, Jinkee, quien había pedido su retiro en varias ocasiones.
“Ella pudo ver que todavía tenía esa llama dentro de mí. Le dije que podía vencer a Barrios y le pregunté qué pensaba. Ella dijo: ‘Sí, puedes pelear contra él. Si ese es tu oponente, demuéstrame que puedes pelear’”, contó Pacquiao.
Manny Pacquiao
Pacquiao, conocido por sus sorpresas, espera brindar otra a sus fanáticos.
Pacquiao, quien inició su carrera profesional en 1995, ha desafiado las expectativas constantemente, acumulando títulos mundiales y demostrando su poder ofensivo.
Para su pelea con Barrios, regresa al MGM Grand Garden Arena, donde construyó su legado. Allí, espera crear más recuerdos y agregar otro título mundial a su impresionante trayectoria.
“Me encanta hacer historia allí. Tengo tantos grandes recuerdos y nunca imaginé después de 24 años que volvería al MGM para ganar otro título mundial. Eso no es más que una bendición de Dios”, dijo Pacquiao.
Manny Pacquiao
El futuro de Pacquiao después de esta pelea es incierto, pero si logra un nuevo triunfo, ¿se retirará o iniciará otro capítulo inesperado en su carrera?
“Es difícil decir qué depara el mañana. Siempre se lo dejo a Dios, y él me dio la oportunidad de pelear de nuevo. Pero si mi cuerpo se siente fuerte después de esta pelea…”, concluyó Pacquiao.
