El Futuro de la WNBA en la Mesa de Negociaciones: Perspectivas desde la Gerencia
En el mundo del deporte profesional, las negociaciones laborales son un terreno delicado. En la WNBA, la comisionada Cathy Engelbert y los dueños de los equipos buscan un acuerdo que impulse el crecimiento de la liga y beneficie a las jugadoras. Sin embargo, la Asociación de Jugadoras ha adoptado una postura más enérgica, generando debate público y críticas.
A medida que las valoraciones de las franquicias de la WNBA se disparan, con un nuevo acuerdo televisivo que comenzará en 2026 y la expansión a 18 equipos para 2030, la liga parece estar en su mejor forma financiera desde su lanzamiento en 1997. La perspectiva de la gerencia en estas negociaciones es clara: continuar el crecimiento financiero para asegurar una liga rentable, recompensando a las jugadoras como agentes clave de este éxito.
Cathy Engelbert asumió el cargo de comisionada de la WNBA en julio de 2019, y desde entonces ha liderado la liga a través de un período de crecimiento notable, incluyendo un acuerdo de derechos de medios por $2.2 mil millones, valoraciones de franquicias que alcanzan cientos de millones de dólares y la expansión de la liga. Sin embargo, su mandato ha enfrentado desafíos recientes, incluyendo críticas sobre el arbitraje y declaraciones polémicas de jugadoras.
Engelbert ahora está en la mesa de negociaciones con la tarea de lograr un acuerdo «transformador» que no solo aumente significativamente los salarios y la compensación de las jugadoras, sino que también incentive la inversión continua de los propietarios y asegure la viabilidad a largo plazo de la liga.
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Una vez que se complete el acuerdo, surgirá la pregunta sobre la permanencia de Engelbert como comisionada. Si bien ella ha expresado su compromiso de solucionar los problemas, la decisión final podría depender de otros factores.
Adam Silver, comisionado de la NBA, ha sido testigo del desarrollo y lanzamiento de la WNBA. Bajo su liderazgo, la NBA busca que la WNBA opere de manera independiente, pero el progreso financiero de la WNBA en los últimos años ha llevado a Silver a involucrarse más, especialmente con el interés de las franquicias de la NBA en la propiedad de equipos de la WNBA. Esto podría aumentar la presión en la relación de trabajo entre Silver y Engelbert. En última instancia, Silver desea que la WNBA se consolide financieramente como una parte importante de la marca global de la NBA.
Dueños: Inversión y Visión de Futuro
Los dueños de la WNBA se dividen en dos categorías principales: millonarios y multimillonarios. Joe Tsai, propietario de las New York Liberty, y otros como Joe Lacob (Golden State Valkyries), Mark Davis (Las Vegas Aces) y Mat Ishbia (Phoenix), están dispuestos a invertir fuertemente para obtener mayores retornos. Ven a la WNBA como un negocio de inversión, y mientras el producto genere ganancias, seguirán invirtiendo.
Por otro lado, los dueños independientes, que ayudaron a mantener a flote a la WNBA en sus primeros años, ahora son superados en número por los dueños de la NBA, quienes han reconocido el potencial financiero renovado del baloncesto femenino. Estos dueños independientes se enfocan en limitar gastos y mantener la igualdad de condiciones. Han argumentado a favor de recuperar las pérdidas incurridas en la operación de sus franquicias cuando los ingresos de la WNBA no eran tan fuertes. Sin embargo, esto no debe confundirse con una falta de inversión.
Equipos de Expansión: Un Nuevo Capítulo
Tras la exitosa temporada de debut de las Valkyries como equipo de expansión, cinco nuevos equipos esperan su momento. Los equipos de expansión más ansiosos por un nuevo convenio colectivo son Portland Fire y Toronto Tempo, quienes iniciarán sus temporadas inaugurales en 2026. Las reglas para el próximo draft de expansión de dos equipos deben ser negociadas colectivamente, por lo que estas franquicias no podrán construir sus plantillas hasta que llegue un nuevo acuerdo.
Gerentes Generales y Entrenadores: Impacto Directo
Aunque los gerentes generales no están directamente representados en la mesa de negociaciones, las reglas establecidas en el convenio colectivo de trabajo influyen en la construcción de plantillas y la distribución financiera entre propietarios y jugadoras. Los ejecutivos observarán cómo el nuevo convenio les otorga mayor flexibilidad. Los entrenadores, como Cheryl Reeve, Sandy Brondello y Becky Hammon, también se verán afectados por el nuevo convenio, que impactará aspectos como la priorización y el tamaño de las plantillas. Estos entrenadores, que también son defensores del empoderamiento de las mujeres, quieren que la WNBA no solo sea financieramente estable, sino que también continúe creciendo.
