El Indiana Fever enfrentó su primer desafío sin Caitlin Clark, su estrella reclutada en el draft de 2024, y las cosas no salieron como esperaban.
El equipo cayó a un récord de 2-3 en la temporada, tras perder 83-77 contra el Washington Mystics, en el primer partido de la WNBA celebrado en Baltimore.
Creo que esto fue un golpe para nosotros. Vamos a volver mañana al entrenamiento con más enfoque y energía. Sabemos dónde queremos estar al final de la temporada, pero no vamos a llegar ahí de la noche a la mañana.
Sophie Cunningham
El Fever, que había generado expectativas de campeonato, tuvo dificultades en el juego. Sus porcentajes de tiro fueron bajos, con un 39.7% de campo y un 23.8% en triples, ambos mínimos de la temporada. Además, cometieron más pérdidas de balón (16) que asistencias (15).
La ausencia de Clark, que estará fuera al menos dos semanas debido a una lesión, impactó en el ritmo del juego del equipo, que no logró anotar puntos en contraataque.
Con Clark en la cancha, el equipo promedia 107.5 puntos por cada 100 posesiones, pero sin ella, esa cifra desciende a 87.7.
Sydney Colson reemplazó a Clark en la posición de base, finalizando con 4 puntos, 3 asistencias y 3 pérdidas de balón en 31 minutos. DeWanna Bonner lideró al equipo con 21 puntos, mientras que Kelsey Mitchell y Aliyah Boston, otras figuras clave, tuvieron dificultades para anotar.
El entrenador Stephanie White atribuyó los problemas ofensivos a la falta de ejecución ante la defensa física de Washington.
Sentirse cómodos con nuestras acciones sin balón sigue siendo un proceso de crecimiento para nosotros. Se puede ver que cuando aumenta la agresividad defensiva, volvemos a viejos hábitos, optando por el uno contra uno, tiros en suspensión, en lugar de confiar en el movimiento del balón y jugar con acciones sin balón.
Stephanie White
La defensa también presentó problemas, permitiendo 48 puntos en la pintura y sufriendo ante los ataques del rival.
Brittney Sykes lideró a Washington con 21 puntos, mientras que Kiki Iriafen aportó 16.
Apuesto a que consiguieron entre cuatro y cinco bandejas solo por nuestra mala selección de tiros. Esas cosas tienen que mejorar, y tienen que mejorar en cada partido. Y siento que nos hemos estancado un poco en nuestra área de crecimiento en esas cosas.
Stephanie White
Clark, quien no había faltado a un partido en su carrera profesional y universitaria, viajó con el equipo a Baltimore y estuvo presente en el banquillo, brindando apoyo a sus compañeras.
El partido, que se jugó a casa llena, fue presenciado por una multitud que apoyaba tanto al equipo local como a las visitantes.
Clark, quien fue elegida para el primer equipo All-WNBA y quedó cuarta en la votación de MVP en su temporada de novata, se perderá al menos tres partidos más.
El Fever espera que la ausencia de Clark sea una oportunidad de crecimiento para ella y para el equipo en general.
Creo que a corto y largo plazo esto nos hará mejores.
Sophie Cunningham