Roland Garros: El difícil camino para ganarse el corazón del público
En el corazón del tenis mundial, el torneo de Roland Garros se distingue no solo por la competencia en la cancha, sino también por la intensa conexión emocional que establece el público con los jugadores. La reciente despedida de Richard Gasquet, tras su derrota ante Jannik Sinner, fue un claro ejemplo de esta relación especial.
El cariño y la nostalgia se apoderaron de la cancha Philippe-Chatrier al despedir a Gasquet, un tenista que deslumbró desde sus inicios a los 15 años, dejando una huella imborrable en el mundo del tenis.
Ese mismo día, Gael Monfils, otro ícono del tenis francés, desplegaba su magia contra Jack Draper. El público, cautivado por Monfils, anhelaba otra victoria memorable en casa, demostrando la pasión que despiertan los jugadores locales.
En Roland Garros, el apoyo al jugador local es incondicional, transformando la atmósfera en un fervor tricolor. Sin embargo, ganarse el amor del público como extranjero es un camino arduo que requiere tiempo y dedicación.
“Creo que el pueblo francés tiene un fuerte sentimiento por el país, un fuerte sentimiento nacional. Para alguien que no es francés, lleva mucho tiempo ganarse este afecto”, comentó el extenista Feliciano López.
Feliciano López
Si bien hay respeto por los campeones del pasado, incluso para aquellos que han logrado múltiples títulos, como Iga Swiatek, la conexión emocional con el público aún está en desarrollo.
El dominio de Swiatek genera admiración, pero el público aún está aprendiendo a amarla. Coco Gauff, Aryna Sabalenka y Mirra Andreeva también son populares, pero necesitan un título para iniciar su camino hacia el cariño del público.
La presencia de Rafael Nadal, incluso después de su retiro, sigue siendo omnipresente. Tras su despedida, se le rindió homenaje con una huella permanente en la cancha.
Nadal, que también tuvo que ganarse el cariño del público, expresó su gratitud por el apoyo recibido a lo largo de los años.
En la tribuna, en la despedida de Nadal, estaban Swiatek y Carlos Alcaraz, el actual campeón del Abierto de Francia. Alcaraz podría ser el sucesor de Nadal, pero aún no.
En el ámbito masculino, Joao Fonseca, con tan solo 18 años, ha generado gran interés en Roland Garros. Arthur Fils también está ganando seguidores, pero al igual que Gasquet, Monfils, Simon y Tsonga, se beneficia del apoyo local.
Según López, la conexión especial que Nadal forjó con el público de Roland Garros es única y difícilmente se repetirá.
Para ser amado en Roland Garros, la longevidad, la capacidad de superar la adversidad y la apreciación por el torneo son fundamentales. Nadal encapsuló todas estas cualidades.
En su conferencia de prensa de despedida, Nadal expresó su deseo de ser recordado como alguien a quien el público siempre estará feliz de ver. Ganar 14 títulos en Roland Garros es algo que puede suceder, pero se necesita suerte y tiempo, al menos 30 años más.
