Múnich – Luis Enrique, entrenador del Paris Saint-Germain, ha declarado que el equipo tiene como objetivo «seguir conquistando» tras su victoria en la final de la Liga de Campeones, y que la Copa Mundial de Clubes de la FIFA es la «guinda del pastel». El PSG aseguró su primer título de la Champions League con una contundente victoria de 5-0 sobre el Inter de Milán.
Los goles de Désiré Doué (2), Achraf Hakimi, Khvicha Kvaratskhelia y Senny Mayulu sellaron la victoria del PSG, convirtiéndolos en el segundo club francés, después del Olympique de Marsella en 1993, en coronarse campeones de Europa.
El PSG participará en la primera Copa Mundial de Clubes en Estados Unidos este verano, enfrentándose al Atlético de Madrid en Pasadena, California, el 15 de junio en su primer partido. Enrique, ex entrenador del Barcelona, ha instado a su equipo a seguir ganando.
En mi primer día en el PSG, tuve mi primera conferencia de prensa y dije que mi objetivo final como entrenador era llenar la vitrina de trofeos. El único que faltaba era la Champions League, pero aquí estamos.
Luis Enrique
El entrenador añadió: «Hemos marcado esa casilla ahora, pero somos ambiciosos y vamos a seguir conquistando».
La Copa Mundial de Clubes es una competición increíble, aún no es igual que la Champions League, pero se convertirá en algo que todos los mejores equipos del mundo querrán ganar.
Luis Enrique
Enrique concluyó: «Queremos terminar la temporada con estilo y eso sería la guinda del pastel, y nuestro quinto trofeo esta temporada, si lo logramos».
A pesar de la victoria, Enrique reconoció la dificultad que el Inter de Milán planteó al PSG y admitió que su equipo tuvo «suerte» al concretar las oportunidades.
Enrique comentó: «Había tanta tensión antes del partido que realmente no sé qué pensar. No sé si podemos llamar a la actuación una obra maestra, pero tuvimos un gran comienzo y mi equipo estuvo excepcional».
Finalizó diciendo: «Hubo mucha presión por parte del Inter y tuvimos mucha suerte con nuestros goles porque cada vez que tuvimos oportunidades, las metimos en la red. Al final, controlamos el partido. Nuestros aficionados demostraron esta noche lo intensos que son, fueron nuestro jugador número 12 y mi equipo reflejó su pasión».
