MLS se Impone a la Liga MX en el Partido de las Estrellas, pero ¿Necesita un Cambio?
El MLS All-Star Game de este año, que vio a la MLS derrotar a las Estrellas de la Liga MX con un marcador de 3-1, ha concluido. Sin embargo, la victoria plantea interrogantes importantes sobre el futuro de este evento y su capacidad para mantener el interés de los aficionados.
El encuentro, celebrado en el Q2 Stadium de Austin, Texas, contó con goles de Sam Surridge, Brian White y el MVP Tai Baribo, brindando una noche exitosa para la MLS. No obstante, la ausencia de figuras clave como Lionel Messi y Jordi Alba, ambos seleccionados pero ausentes, generó debate.
Los jugadores son convocados, me gustaría que pudieran descansar, pero esa no es mi decisión. Sé lo importante que es el All-Star Game y, por lo que sé, no hay ninguna decisión del club, todo es normal.
Javier Mascherano, entrenador del Inter Miami CF
La congestión del calendario es un factor clave. Tanto la MLS como la Liga MX enfrentan una agenda apretada, incluyendo partidos de temporada regular y la Leagues Cup. La situación de Messi y otros jugadores, con un calendario intensivo, subraya la dificultad de equilibrar la participación en el All-Star Game con la necesidad de descanso.
La ausencia de figuras importantes no es un fenómeno nuevo. Zlatan Ibrahimovic en 2018 y jugadores de la Liga MX como James Rodríguez y Sergio Ramos, también declinaron la invitación. Esta situación plantea preguntas sobre el atractivo del evento y su capacidad para reunir a las estrellas más brillantes.
La creciente cantidad de enfrentamientos entre la MLS y la Liga MX, incluyendo la Leagues Cup, la Campeones Cup y la Concacaf Champions Cup, también diluye el impacto del All-Star Game. La pregunta es si este evento se está perdiendo entre la multitud de enfrentamientos entre ambas ligas.
Ya tienes la Campeones Cup y ya tienes la Leagues Cup. ¿Cuánto es demasiado y qué estamos tratando de hacer aquí? ¿Realmente disfruta un aficionado [el All-Star Game]?
Herculez Gomez
Para la edición de 2026, que se jugará en el Bank of America Stadium de Charlotte, Carolina del Norte, aún está por determinar el formato, así como la participación de las estrellas más importantes de la liga.
