El Manchester United se Prepara para una Revolución en el Mediocampo
El Manchester United planea reforzar su mediocampo en el próximo mercado de fichajes de verano, con el objetivo de reducir su masa salarial en aproximadamente 1 millón de libras esterlinas semanales. Esta estrategia permitirá al club reinvertir esos ahorros en jugadores jóvenes y con potencial a largo plazo, buscando fortalecer el equipo de Ruben Amorim.
La finalización de los contratos de jugadores clave como Casemiro, Harry Maguire y Jadon Sancho, sumado a la posible salida de Marcus Rashford, cuyo salario semanal es de 325,000 libras, han brindado al United la oportunidad de generar importantes ahorros económicos.
Fuentes cercanas al club afirman que este impulso financiero permitirá al United competir por los fichajes necesarios para completar la siguiente fase de reconstrucción del equipo, bajo la dirección de Jason Wilcox y Ruben Amorim.
El United ya ha expresado interés en el mediocampista del Brighton, Carlos Baleba, realizando consultas tentativas en agosto, antes de que el club estableciera una valoración de 115 millones de libras esterlinas para el jugador camerunés de 21 años. Además, existe un interés continuo en Adam Wharton, mediocampista inglés de 21 años del Crystal Palace, y en Angelo Stiller, centrocampista alemán de 24 años del VfB Stuttgart.
A pesar de la importancia de Casemiro en el equipo, que cumplirá 34 años en febrero, no se planean incorporaciones en el mediocampo durante el mercado de enero, ya que el club prefiere esperar al verano para asegurar sus objetivos prioritarios.
El United invirtió 225 millones de libras esterlinas en nuevos fichajes este verano, incluyendo a Matheus Cunha, Bryan Mbeumo y Benjamin Sesko, antes de concretar la llegada del portero Senne Lammens en el último día del mercado. Aunque el equipo de reclutamiento reconoció la necesidad de refuerzos en el mediocampo, se rechazó la oferta del Chelsea por Romeo Lavia como parte del acuerdo que llevó a Alejandro Garnacho al Stamford Bridge.
Si bien una serie de salidas en agosto ayudaron a aliviar las restricciones presupuestarias, la situación financiera del United no permitió más movimientos en el mercado de fichajes. Además, es poco probable que enero ofrezca al club la oportunidad de realizar nuevas incorporaciones.
La jerarquía del United cree que el club ha comenzado a estabilizarse dentro y fuera del campo, tras un período turbulento de 18 meses. La falta de participación en competiciones europeas esta temporada ha costado al United al menos 40 millones de libras esterlinas en ingresos perdidos. Sin embargo, la eficiencia impulsada bajo Ineos, combinada con una reducción del 25% en los salarios de los jugadores, ha reducido la masa salarial del United a su nivel más bajo desde la temporada 2017-18.
El próximo verano se perfila como un período de fichajes muy activo para Ruben Amorim y el Manchester United.
La masa salarial del United para la temporada 2024-25 se redujo a 313 millones de libras esterlinas, en comparación con los 364.7 millones del año anterior, y se espera que la cifra de esta temporada también disminuya debido a que los nuevos contratos están muy incentivados y comenzaron con un salario base más bajo.
Se esperan más ahorros con las salidas de Sancho, Rashford, Casemiro y Maguire. El salario de 300,000 libras esterlinas semanales de Sancho dejará de figurar en las cuentas cuando su contrato expire al final de la temporada. Rashford tiene dos años y medio más de contrato con un salario de 325,000 libras esterlinas semanales, pero se espera que se marche el próximo verano.
Casemiro y Maguire finalizan sus contratos en junio próximo, ambos con salarios elevados. Se espera que el United negocie nuevos acuerdos con ambos jugadores, pero con términos significativamente reducidos e incentivados. Esto permitiría al United ahorrar alrededor de 1 millón de libras esterlinas semanales, y más de 50 millones de libras al año, al prescindir de Sancho y Rashford y pagar a Casemiro y Maguire salarios más bajos. Dichos ahorros permitirían al United pagar cómodamente los salarios de dos nuevos centrocampistas, con los fondos provenientes de sus ingresos.
Los movimientos para Baleba y Wharton podrían costarle al United un total combinado de 180 millones de libras esterlinas si persiguen a la pareja nuevamente el próximo verano, mientras que Stiller está valorado en el rango de los 50 millones de libras.
Independientemente de lo que suceda en futuros mercados de fichajes, los días en que el United fichaba a estrellas veteranas con grandes sumas y salarios elevados, han quedado atrás. El United está ahora jugando a largo plazo y, tras haber identificado la necesidad de un reclutamiento más inteligente y un gasto sensato, ya se están sentando las bases para el mercado de fichajes del próximo verano.
