El Manchester City de Pep Guardiola busca cerrar un año complicado en Wembley el sábado. La final de la FA Cup contra el Crystal Palace representa una oportunidad para cambiar el rumbo de una temporada que ha estado por debajo de las expectativas.
Hace un año, en la misma ciudad, el City sufrió una derrota ante el Manchester United en la final de la FA Cup, un resultado que Guardiola atribuyó inicialmente a errores tácticos. Sin embargo, esa derrota marcó el inicio de una temporada con altibajos para el equipo, que ha experimentado su peor rendimiento en casi una década.
El partido del sábado contra el Crystal Palace, que se transmitirá en vivo, ofrece la posibilidad de un nuevo comienzo. El equipo espera que ganar el trofeo impulse una remontada en el fútbol inglés y europeo.
No hemos estado peleando en la Premier League ni en la Champions League, y eso no es suficiente para un club como el City.
Erling Haaland
Guardiola ha reconocido que ganar a Palace no salvará la temporada, pero podría dar un impulso para la campaña 2025-26 y la lucha por recuperar el título de la Premier League.
El entrenador ha cambiado su perspectiva sobre lo que salió mal contra el United. Si bien inicialmente culpó a un plan de juego deficiente, ahora considera que la motivación de los jugadores pudo no haber sido la adecuada después de celebrar el triplete en 2023.
El propio Haaland ha admitido que no ha rendido al nivel esperado y que el equipo no ha tenido el hambre necesaria. Ilkay Gündogan también ha señalado que el equipo a veces ha priorizado la táctica sobre la determinación y la agresividad.
Una serie de factores han contribuido al bajo rendimiento del City, incluyendo lesiones importantes de jugadores clave como Rodri, que ha estado fuera durante siete meses. Además, Guardiola ha reconocido que pudo haber sobreestimado la capacidad de jugadores veteranos para mantener su nivel de rendimiento.
La racha de resultados del City al final de la temporada sugiere que están encontrando la manera de solucionar sus problemas, pero ganar la FA Cup el sábado también aceleraría esa sensación de recuperación.
Guardiola ha dado más responsabilidad a jóvenes jugadores y ha modificado su plan táctico, implementando un mediocampo con dos mediocampistas defensivos y dos delanteros interiores. Gündogan ha notado una mejora en la mentalidad del equipo desde una victoria reñida contra el Bournemouth.
A pesar de una racha invicta de 10 partidos, el City se enfrentará a un Palace que ha demostrado ser un rival difícil. El equipo de Oliver Glasner empató 2-2 en diciembre y estuvo 2-0 arriba en el Etihad Stadium antes de perder 5-2.
Glasner, Eze y el Palace llegarán a Wembley con confianza, buscando infligir otra derrota al City. Para Guardiola y sus jugadores, esta es una oportunidad para avanzar en el camino hacia la recuperación.