Knicks se Desinflan: Pacers Remontan y Roban el Primer Juego de la Serie

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Knicks Sufren Derrota Inesperada ante Pacers en el Primer Juego de las Finales de Conferencia

En un giro dramático que dejó a los aficionados boquiabiertos, los New York Knicks cayeron ante los Indiana Pacers en el primer juego de las Finales de la Conferencia Este. El encuentro, que se extendió hasta el tiempo extra, culminó con un marcador de 138-135 a favor de los Pacers, a pesar de que los Knicks lideraban por 14 puntos en los últimos tres minutos del tiempo reglamentario.

Jalen Brunson, la estrella de los Knicks, se sentó en el podio para responder preguntas sobre otra remontada improbable, pero esta vez, el equipo neoyorquino se encontró en el lado perdedor del espectáculo. Los Knicks, conocidos por su tenacidad, no pudieron mantener su ventaja, cometiendo errores defensivos y costosas pérdidas de balón que les costaron el juego.

Defensivamente, dejamos de pisar el acelerador. La intensidad y la agresividad no estaban presentes.

Josh Hart

El alero Josh Hart, expresó su frustración tras el partido. Por su parte, el pívot Karl-Anthony Towns, quien tuvo una destacada actuación con 35 puntos y 12 rebotes, reconoció que el equipo jugó bien durante 46 minutos, pero que los dos minutos finales fueron fatales.

Hubo muchas cosas buenas que hicimos y nos pusimos en posición de ganar. Jugamos 46 minutos buenos. Esos dos minutos [son] donde perdimos el juego, y eso es culpa de todos nosotros.

Karl-Anthony Towns

La derrota se debió en gran medida a la incapacidad de los Knicks para cerrar el juego. Los Pacers lograron un perfecto 6 de 6 en tiros durante ese lapso, incluyendo cinco triples. Aaron Nesmith encendió la chispa para los Pacers, terminando con 30 puntos. El entrenador de los Knicks, Tom Thibodeau, reconoció que Nesmith tuvo demasiado espacio.

El único tiro de Indiana que no fue un triple, un jumper de Tyrese Haliburton, que rebotó alto en el aro antes de caer, pareció que también lo sería. Sin embargo, las repeticiones aclararon que su pie estaba en la línea, dando a los Knicks un respiro. Pero en el tiempo extra, los Knicks no pudieron recuperarse.

Con el marcador 136-135 a favor de Indiana y 20 segundos restantes, Nueva York pareció querer cometer una falta a los Pacers con la esperanza de recuperar el balón. Pero fallaron en ese plan, y Obi Toppin logró un mate demasiado fácil. Los Knicks tuvieron una última posesión para empatar el juego, pero Brunson y Towns fallaron triples en los últimos 10 segundos, sellando la remontada de Indiana.

El esfuerzo de los Knicks fue desperdiciado. Brunson, quien terminó con 43 puntos, se vio obligado a salir con cinco faltas personales cuando quedaban 10 minutos en el cuarto período. Nueva York lideraba 94-92 en ese momento, pero logró una racha de 14-0 en los siguientes dos minutos y medio, dándoles una ventaja de 16 puntos. El Garden estaba eléctrico mientras parecía que los Pacers finalmente se habían quedado sin respuestas.

La derrota evocará comparaciones con la remontada de los Pacers en 1995. La pregunta de cómo se desarrollarían los juegos cerrados siempre fue algo a tener en cuenta en la serie. Tanto los Pacers como los Knicks lograron un par de victorias después de remontar déficits de 20 puntos durante las dos primeras rondas de los playoffs. Brunson había hecho la mayor cantidad de canastas en momentos cruciales en esta postemporada, mientras que Haliburton había anotado la mayor cantidad de tiros en el último minuto de los juegos.

Los Pacers asestaron el primer golpe, dejando sin duda a los Knicks un poco heridos en esta primera ronda.

En los playoffs, cuando ganas, es lo mejor que hay. Cuando pierdes, es lo peor que hay.

Jalen Brunson

Brunson y los Knicks ahora tienen la tarea de reagruparse para no encontrarse con una sensación aún peor el viernes: ir a Indianápolis con una desventaja de 2-0.

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