El centro de los Knicks, Karl-Anthony Towns, reveló que está lidiando con una distensión de cuádriceps de grado 2, lo que generó dudas sobre su participación en el partido inaugural de la temporada contra los Cavaliers.
Poco antes del inicio del juego, Towns se declaró apto para jugar, y luego anotó 19 puntos y logró 12 rebotes en 31 minutos, en un enfrentamiento entre dos de los equipos favoritos de la Conferencia Este.
La decisión de que Towns jugara se produjo después de que se le considerara en duda en el informe de lesiones de los Knicks a primera hora de la tarde del miércoles, y luego se le actualizara a cuestionable una hora después.
He estado con problemas, y realmente no he tenido la oportunidad de practicar o jugar en los últimos dos partidos de pretemporada. No quería decepcionar a los fanáticos. No es algo fácil de manejar, [pero] lo hicimos posible esta noche.
Karl-Anthony Towns
Cuando se le preguntó si sentía dolor mientras jugaba, Towns respondió: «Definitivamente me dolía». No reveló si esto afectaría su disponibilidad para el partido del viernes contra los Celtics.
En varias jugadas, Towns usó su físico para superar al pívot de los Cavaliers, Evan Mobley. No se alejó demasiado de la línea de 3 puntos, con solo cuatro intentos. Los Knicks han enfatizado jugar más rápido, pero Towns demostró que aún podía jugar un baloncesto agresivo en ocasiones.
Una ráfaga de Donovan Mitchell (31 puntos) le dio a los Cavaliers una breve ventaja en el último cuarto, pero los Knicks rápidamente la sofocaron con una racha de 14-0 para tomar una ventaja de 101-89 con 8:45 restantes. Todo el daño se hizo con el máximo anotador y Jugador Clutch del Año, Jalen Brunson, en el banquillo por su descanso habitual.
Towns superó los problemas de faltas tempranas para tener una noche productiva para los Knicks, que ya no contaban con dos jugadores regulares: el pívot Mitchell Robinson (gestión de carga) y el alero Josh Hart (espalda). Estar sin un tercer jugador de rotación habría obligado al entrenador Mike Brown a profundizar en su banquillo durante su primer partido como entrenador de los Knicks.
La situación incierta de Towns añadió intriga a un partido que ya tenía mucha, incluyendo a Brown recibiendo su primera probada de las enormes expectativas que le esperan después de que su predecesor, Tom Thibodeau, ayudara a llevar a los Knicks a sus primeras finales de conferencia desde el año 2000.
Brown utilizó a 11 jugadores en el partido inaugural, un desarrollo algo nuevo con respecto al régimen anterior, y los Knicks mantuvieron ventajas cómodas durante gran parte de la noche.
Este equipo es un equipo profundo. Le doy mucho crédito a Leon Rose y a su grupo. Es mi trabajo seguir encontrando combinaciones que funcionen. También tengo mucho margen para crecer.
Mike Brown
Añadió: «Puedo aprender sobre la marcha porque tenemos muchos jugadores que pueden jugar. No sé si jugaré con 11 jugadores cada noche, pero nos gusta jugar con tantos como podamos».
No era la primera vez de Brown en el Madison Square Garden, pero la energía fue diferente para este partido inaugural de temporada. Dijo que Spike Lee lo saludó antes del partido y que le sorprendió que Lee supiera quién era.
Se le preguntó a Brown si se tomó un momento para sentir las expectativas del mundo exterior, y señaló que las internas son igual de importantes.
Nuestras expectativas son extremadamente altas. Hayamos ganado o perdido, es un juego. No sentimos que estemos ni cerca de lo que somos capaces de hacer, y eso es lo que lo hace emocionante.
Mike Brown
