En medio de la presión de la competencia y la lucha por el campeonato, Tyler Reddick enfrentó una batalla aún mayor fuera de la pista. Su esposa reveló que su hijo recién nacido, Rookie, fue diagnosticado con un tumor en el pecho que afecta su corazón.
El piloto, que compitió en la carrera del domingo con las esperanzas del campeonato en juego, vio cómo sus aspiraciones se veían afectadas por la situación de salud de su hijo. La noticia de la enfermedad de Rookie se dio a conocer justo antes de la carrera en The Roval en Charlotte Motor Speedway.
Reddick, que partía desde la pole position, necesitaba una victoria para mantenerse en la contienda por el título de la Cup Series.
La carrera fue ganada por Shane van Gisbergen, lo que eliminó a Reddick de los playoffs. Reddick finalizó en décima posición.
El tumor está «ahogando» la vena y la arteria renal. Le dice al corazón ‘Oye, no estoy recibiendo suficiente sangre… bombea con más fuerza'».
Alexa Reddick
Alexa Reddick, a través de las redes sociales, informó que la condición de Rookie ha provocado un agrandamiento del corazón y que necesitará que le extirpen un riñón, ya que los médicos determinaron que ya no funciona correctamente.
La cirugía para extirpar el riñón derecho está programada, pero aún no hay una fecha definida. Mientras tanto, el pequeño se encuentra medicado para controlar la presión arterial, con la esperanza de que su corazón se recupere por completo.
A pesar de la difícil situación, Rookie se mantiene alegre, disfrutando de actividades como jugar con burbujas e interactuando con el personal médico.
Tyler Reddick había mantenido la situación de salud de su hijo en privado hasta que su esposa decidió hacerla pública antes de la carrera de la semana anterior en Kansas Speedway.
Reddick expresó su felicidad por la mejoría de su hijo, aunque reconoció que aún quedan momentos difíciles por delante.
El piloto, que llegó a la final del campeonato el año pasado, se encontraba por debajo de la línea de corte de los pilotos antes de la carrera del domingo. La competencia redujo el grupo de 12 a ocho, eliminando a Reddick, Bubba Wallace, Ross Chastain y Austin Cindric.
Reddick afirmó que, en ese momento, lo más importante era el bienestar de su hijo, dejando de lado cualquier otra preocupación.
Denny Hamlin, copropietario del coche de Reddick, resaltó el apoyo brindado por 23XI Racing para garantizar la mejor atención médica a Rookie.
Hamlin expresó alivio al saber que la familia Reddick tiene una idea clara del camino a seguir.
Reddick agradeció el apoyo recibido y reflexionó sobre el impacto emocional que esta situación ha tenido en su familia.
El piloto destacó la gran cantidad de personas que han ofrecido su apoyo y ayuda, lo que ha sido revelador para él y su esposa.
Reddick y su esposa tomaron la decisión de que el piloto compitiera en Kansas, ya que Rookie se encontraba estable y en recuperación.
