ATLANTA – El estelar bateador de los Filis, Kyle Schwarber, se convirtió en la figura central del 95° Juego de Estrellas, liderando a la Liga Nacional a la victoria sobre la Liga Americana en un emocionante «Derby decisivo». Su impresionante desempeño, incluyendo tres jonrones en tres swings, le valió el premio al Jugador Más Valioso del All-Star Game Ted Williams, presentado por Chevrolet.
Schwarber expresó su entusiasmo tras el juego: «Fue increíble. Los muchachos estaban muy entusiasmados, animando cada swing. Cuando el último jonrón cruzó la cerca, todos estaban eufóricos. Fue muy divertido».
Después de que la Liga Americana empatara el juego 6-6 en el noveno episodio, el resultado se definió en una ronda especial de jonrones entre tres bateadores por equipo. Schwarber, con sus espectaculares batazos de 428, 461 y 382 pies, aseguró la victoria de su equipo.
El «derbi decisivo» en acción
Este innovador «derbi decisivo» se implementó en el nuevo convenio colectivo, marcando su debut en este encuentro estelar. Los mánagers Aaron Boone (Liga Americana) y Dave Roberts (Liga Nacional) seleccionaron a sus representantes para la competencia final.
- Liga Nacional (4 HR):
- Kyle Stowers: 1
- Kyle Schwarber: 3
- Pete Alonso: no fue necesario su turno
- Liga Americana (3 HR):
- Brent Rooker: 2
- Randy Arozarena: 1
- Jonathan Aranda: 0
La impecable actuación de Schwarber dejó sin respuesta al mexicano Aranda, quien no logró conectar jonrón, asegurando la victoria de la Liga Nacional con un marcador final de 7-6.
Un MVP histórico para los Filis
Schwarber, quien se enteró el lunes de su posible participación en el «swing-off», aceptó el desafío sin dudarlo. «Me dijeron que Roberts me quería para eso y dije: ‘Por supuesto’. Aunque nunca crees que realmente lo vas a necesitar», comentó.
Con este logro, el toletero zurdo se une a Johnny Callison (1964) como los únicos jugadores de los Phillies en obtener este prestigioso reconocimiento desde su instauración en 1962.
Schwarber atribuyó su éxito a la conexión con Dino Ebel, coach de tercera base de los Dodgers, quien le lanzó las pelotas. «Dino me tiraba práctica de bateo perfecta. Lo conocía desde el Clásico Mundial, así que hubo buena química», explicó.
Una noche memorable y emotiva
El Truist Park fue escenario de un emotivo homenaje multimedia a Hank Aaron y su icónico jonrón 715, con fuegos artificiales, una recreación virtual y la voz de Vin Scully narrando la legendaria conexión.