Red Bull Alerta a la FIA Sobre Posible Juego Sucio Contra Verstappen

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Red Bull Alerta a la FIA sobre Posibles Tácticas contra Verstappen

El equipo Red Bull se comunicó con la Federación Internacional del Automóvil (FIA) antes del Gran Premio de Canadá, expresando su preocupación por posibles maniobras dirigidas a Max Verstappen. Según el jefe del equipo, Christian Horner, el objetivo sería provocar una suspensión de una carrera para el piloto neerlandés.

Verstappen llegó a Montreal con 11 puntos de penalización en su superlicencia, tras un incidente con George Russell de Mercedes en España. Acumular 12 puntos resulta en una suspensión automática.

El piloto no perderá puntos hasta después de la carrera de Austria, el 29 de junio, que es la carrera de casa de Red Bull.

Horner reveló que Red Bull habló con el director de carrera, Rui Marques, después de una reunión de pilotos el viernes, para expresar su inquietud y solicitar que estuviera atento a posibles estrategias.

“Creo que era inevitable que hubiera algo de juego potencial”, comentó Horner a los periodistas.

Christian Horner

Horner añadió que el equipo simplemente solicitó al director de carrera que vigilara la situación, dado que este tipo de situaciones son comunes.

Russell, tras obtener la pole position, indicó que tenía más puntos de penalización disponibles que Verstappen, lo que podría ser una ventaja para él.

George Russell y Max Verstappen cruzan la línea bajo el coche de seguridad en el Gran Premio de Canadá.

Después de que Russell ganara la carrera el domingo, con Verstappen en segundo lugar, Red Bull presentó una protesta.

Un documento posterior de los comisarios rechazó la protesta, revelando que Red Bull había alegado comportamiento antideportivo por parte de Russell durante el despliegue del coche de seguridad.

Red Bull argumentó que Russell frenó innecesariamente y de forma errática detrás del coche de seguridad en la recta trasera y se quejó por radio del equipo de que Verstappen lo había adelantado cuando no estaba permitido.

Red Bull afirmó que el mensaje de radio «mostraba una intención antideportiva» y que la frenada de Russell había tomado por sorpresa a Verstappen, dejándolo sin otra opción que adelantar momentáneamente.

También sugirieron que las cámaras a bordo mostraban a Russell mirando por sus espejos antes de frenar «para forzar a (Verstappen) a adelantar y forzar una infracción».

Russell lo negó, diciendo que no intentaba forzar una investigación, y Mercedes señaló que no habían presentado ninguna queja. Los comisarios aceptaron que no hubo conducta antideportiva.

Russell y Verstappen mantienen una rivalidad latente y Red Bull ha protestado dos veces en cinco carreras contra el piloto de Mercedes.

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